La empresa municipal reactiva tras cuatro años el servicio de gestión de impagos para acercarse a los índices de morosidad de antes de la crisis: un 3% en 2008. En 2015 se dejaron de ingresar 1,2 millones por este motivo.
Una cuestión de justicia social: el que puede pagar debe pagar. Bajo esa premisa obvia, la empresa municipal de vivienda Emuvijesa ha reactivado desde hace unos meses el servicio de gestión de impagos, dotándolo de personal y medios tras más de un mandato en blanco. Tal es la ineficacia y la inactividad en la que había entrado un departamento básico en este ente público que, según su gerente, Eva Bravo, el índice de impagados solo en los pisos de alquiler social ha pasado de un 3% en 2008 a un 26,92% en el conjunto de 2015. Aquí no ha influido solo la crisis y la recesión económica, como pudiera pensarse. "Hay quien tiene y no paga, y eso es lo que debemos evitar porque es perjudicial y una injusticia social para quienes sí hacen el esfuerzo de pagar sus compromisos mensuales", expone en declaraciones a lavozdelsur.es la máximo responsable técnico de Emuvijesa.
Solo en 2015 esta sociedad dejó de ingresar en torno a 1,2 millones de euros como consecuencia de los impagos de estos alquileres. Bajo la gestión del PP la sociedad mercantil que gestiona el parque público de viviendas llegó a acumular en dos años un negativo de 3,1 millones, si bien 2014 -últimas cuentas aprobadas- experimentó una ligera recuperación que le permitió retomar los tradicionales superávits -de unos 170.000 euros en ese año- que la han caracterizado desde que se constituyó hace ahora un cuarto de siglo. La idea clave del servicio de gestión de impagos no solo hacer que paguen quienes pueden permitírselo sino también recuperar patrimonio público que se supone alquilado y con uso pero que, en realidad, permanece sin vida. "Aquí hay de todo, desde gente que tiene el piso porque se ha tenido que marcha fuera con la crisis hasta gente que lo tiene como segunda residencia, y ahí sí dejamos claro que vamos a intervenir", asegura Bravo. Desde noviembre pasado han recuperado cuatro locales comerciales y 2 VPO propiedad de Emuvijesa.
"Se trata en todo momento de llegar a acuerdos extrajudiciales. En el caso de los impagos, por ejemplo, queremos contar con un compromiso de pago firmado, para que a quienes le cueste más vayan pagando la deuda poco a poco y sin interés de demora. Modificamos las condiciones en función de los recursos económicos pero sí tenemos claro que el usuario que tenga que pagar tendrá que hacerlo", resume. El aumento en los índices de impago es brutal y solo durante el último mes de 2015 alcanzó a un 39% de los recibos pendientes por viviendas públicas de régimen social. Solo al iniciarse las reclamaciones judiciales con los locales comerciales de titularidad municipal que no pagaban sus cuotas, "se han puesto al día todos en dos meses". En el caso de las viviendas sociales, "a las familias que acreditan que no tienen ingresos se les da tiempo para que mejoren su situación económica pero permitir los impagos generalizados, aunque haya gente que tenga para pagar, es una injusticia social tremenda", remacha la responsable técnica de Emuvijesa.
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