Hace una década que Jerez tuvo a su último Defensor de la Ciudadanía. En 2013, la entonces alcaldesa María José García-Pelayo cesó al último encargado de ocupar este cargo. Agustín García Lázaro, primero, y Francisco Reinoso, después, ejercieron como Defensor, una figura que estuvo vigente desde 2003 hasta ese año.
El PP aprobó hace diez años el nuevo Reglamento de Participación Ciudadana, que acabó con esta figura de intermediación entre políticos y ciudadanos, que no se ha recuperado en este tiempo. Durante una etapa, se especuló con la posibilidad de resucitar al Defensor de la Ciudadanía, pero nunca se llegó a materializar.
Ahora es el candidato a la Alcaldía de Andalucía x Sí, Santiago Casal, quien propone que se recupere esta figura, y critica que tanto el PP de Pelayo como el PSOE de Mamen Sánchez hayan manifestado su negativa a recuperar el Defensor de la Ciudadanía, "por lo que han dejado claro su modelo de gestión, en el que no quieren ningún tipo de control externo por parte de la ciudadanía", señala en una nota de prensa.
"Para los andalucistas es clave esta figura, dado que es un órgano independiente donde los ciudadanos pueden acudir para presentar demandas, quejas y consultas que el gobierno municipal no atiende o resuelve. Es un órgano de control de la gestión municipal y de la acción del gobierno municipal", reseña AxSí.
En su momento, el PP eliminó al Defensor de la Ciudadanía para sustituirlo por una comisión de sugerencias y reclamaciones, presidida por la alcaldesa, "lo que es una paradoja y un hecho insólito, dado que sería la alcaldesa la que tendría que defender a los ciudadanos que reclamen al propio Ayuntamiento", recuerda.
Los andalucistas destacan la trayectoria de la ciudad en torno a la Participación Ciudadana. Jerez, con gobiernos andalucistas, fue pionera en la implantación de la delegación de Participación Ciudadana, en la Oficina de Atención al Ciudadano, y también en la creación de la figura del Defensor de la Ciudadanía, entre otros.
"La idea primitiva era abogar por la transparencia, facilitar la gestión entre el Ayuntamiento y los ciudadanos, que no se enquistaran los problemas y desatascábamos muchas cosas pero otras estaban apretadas", decía Agustín García-Lázaro, quien fuera el primer Defensor de la Ciudadanía, en una entrevista en lavozdelsur.es. "Parte de la ciudadanía creía que el Defensor tenía que llevar la bandera del cambio social, nos pedían que sustituyéramos a los partidos políticos, a los sindicatos, a las asociaciones de vecinos…", recuerda Francisco Reinoso, quien fue su sucesor.
AxSí sostiene que, tras el 28M, cuando se celebran las elecciones municipales, trabajará "por la recuperación e implantación de nuevo del Defensor de la Ciudadanía, ya que creemos que es necesario que Jerez cuente con esta figura, para que exista un control externo de la gestión municipal".



