Durá, Galvín, Rúa y Saldaña son los ediles que más patrimonio reconocen en las declaraciones de bienes que presentaron al tomar posesión. Galván achaca a esta circunstancia la negativa de los populares a suprimir la bonificación de dicho tributo en pleno.
"¿Por qué el PP quiere eliminar el impuesto sobre sucesiones y donaciones? Creo que el último pleno quedó muy claro; se da la casualidad que de los 27 concejales de la Corporación municipal, este impuesto, en un hipotético caso de aplicación ahora mismo, solo afectaría a cuatro concejales. Los cuatro, claro está, del Partido Popular". El teniente de alcaldesa de Economía y Hacienda, Santiago Galván, se ha referido en su cuenta de facebook a la polémica cuestión que ha obligado a rehacer el Presupuesto municipal de 2017: la negativa de PP y Ganemos de suprimir la bonificación del impuesto municipal de plusvalía, técnicamente llamado Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IVTNU). Sin esta suspensión, a la que obliga un decreto del Gobierno central, las previsiones de ingresos del Consistorio se reducen en 1,8 millones para este año, lo que ha exigido al ejecutivo socialista a modificar las cuentas para equilibrar el saldo final. Bonificación que, de ser eliminada, influirá especialmente en los grandes patrimonios del municipio. Como él mismo aporta en los comentarios de su post en esta red social, "en Jerez el año pasado, de más de 5.000 herederos, solo pagó este impuesto el 5% porque no todo el mundo hereda más de 250.000 euros por heredero".
Pero, sorprendentemente, ¿por qué el PP de Jerez se ha negado por segunda vez en pleno —ya lo hizo en octubre pasado— a respaldar una medida que aprobó el Gobierno de Rajoy en Madrid? Según Galván, porque "es un impuesto que pagan aquellos que más tienen para poder financiar servicios básicos como la educación y la sanidad. El PP lo único que pretende, una vez más, es beneficiar a los ricos, al poderoso". Como refleja el Portal de Transparencia en el apartado dedicado a las declaraciones de bienes y actividades de los ediles, según ha venido recordando estos días el ejecutivo que preside Mamen Sánchez e incluso algún grupo de la oposición como IU, hay cuatro concejales del PP con un importante patrimonio en su poder: Javier Durá, José Galvín, María José Rúa, y Antonio Saldaña. En el caso de Durá y Galvín, son los que mayor listado de bienes inmuebles atesoran.
Como recoge su declaración, Durá dispone (al 50%) de tres fincas urbanas en Jerez, otra en Conil y otra en Cádiz, que es una herencia fechada en noviembre de 1966. Además, tiene dos garajes en propiedad en Jerez, y un parque móvil conformado por una Yamaha XT600, una Kymco de 49 C.C., y dos vehículos al 50%, un Volvo v.70 y un Land Rover. Por último, cuenta con una hipoteca en Bankiter, con unos 98.000 euros pendientes de amortización y que data de 2004, justo el año en el que adquirió la última de sus tres fincas en la ciudad.
"Si se aplicara ahora mismo solo afectaría a estos cuatro ediles", afirma Galván
En cuanto a Galvín, tiene tres viviendas (al 50% en propiedad): una en Jerez, en El Puerto y otra en Lepe. Aparte, posee tres garajes y un trastero al 50% en Jerez, y otro garaje más al 100% en El Puerto. Tiene 189 acciones de Telefónica, un Volkswagen Golf de 2009 y un préstamo en Bankia con unos 18.000 euros pendientes de amortización. Otra de las más representantes municipales más afectadas por el impuesto de plusvalía es la popular María José Rúa. Cuenta con una vivienda en propiedad (al 50%) en Jerez, escriturada en 1986, mientras que también posee el 100% de un cercado y el 50% de unas tierras de secano en Alcubillas (Ciudad Real). Posee un Mercedes C-180 y un Ford Fiesta.
Por último, el portavoz municipal y parlamentario andaluz del PP, Antonio Saldaña, cuenta con dos viviendas en Jerez (2004 y 2008), así como con un garaje y un trastero. Propiedas, todas ellas, que mantiene en propiedad al 50%. En la declaración registrada en su toma de posesión como concejal declaró contar con un Audio A3 y el 50% de un Renault Clio Familiar. Tiene dos préstamos hipotecarios suscritos con Cajasol con unos 36.000 y 155.000 euros pendientes de amortizar, mientras que también debe liquidar un préstamo personal de 2014 con unos 11.700 euros pendientes.
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