Este martes al mediodía saldrán desde el parque de bomberos de Jerez de un dispositivo del Consorcio de Bomberos de la Provincia de Cádiz (CBPC) con destino a Galicia. El objetivo: sumarse a las labores de extinción de los devastadores incendios que mantienen en vilo a la comunidad desde hace más de dos semanas.
La partida contará con la presencia de representantes institucionales. José Ortiz, presidente del CBPC, y la alcaldesa de Jerez de la Frontera, María José García-Pelayo, acompañarán al equipo en este despliegue de apoyo que reforzará a los efectivos ya trabajando sobre el terreno.
La situación en Galicia es alarmante. Según la Xunta, el fuego ha destruido ya 62.973,5 hectáreas. Ourense es la provincia más castigada, con un gran frente unificado en Chandrexa – Vilariño de Conso que suma 17.500 hectáreas calcinadas, y otro en Larouco – Seadur, con 15.000 hectáreas arrasadas. En Lugo persisten focos activos, mientras que en A Coruña el incendio de Toques ha podido darse por extinguido.
Problemas que se multiplican
El balance humano también preocupa: cuatro operarios han resultado heridos en las labores de extinción, uno de ellos con quemaduras graves. Las llamas han obligado al confinamiento de más de 120 mayores en residencias de Ourense y a desalojos preventivos en varias aldeas. El fuego afecta incluso a la movilidad: la línea de AVE Madrid-Galicia continúa suspendida por su cercanía a las llamas.
El Infoca mantiene a su vez módulos de acción exterior en distintos puntos de España. En Cáceres, dos aviones anfibios ligeros siguen operando en el incendio de Jarilla; en León, el equipo desplazado comienza su regreso, al igual que en Lugo, donde la Brica de Jerez del Marquesado ha iniciado ya la vuelta a su base tras días de intenso trabajo.
En este momento, Galicia, Castilla y León y Extremadura concentran los incendios más graves de esta oleada, auténticos megaincendios de sexta generación, con frentes que por sí solos superan las 10.000 hectáreas devastadas.