La acumulación de este producto en colectores y estaciones de bombeo obliga a Aguas de Cádiz a realizar trabajos de urgencia durante el fin de semana.
“Las obras civiles que estamos llevando a cabo para evitar las inundaciones en las calles de Cádiz no servirán para nada si la gente sigue tirando toallitas al inodoro”, así de contundente se ha mostrado el presidente de Aguas de Cádiz, Álvaro de la Fuente, ante la actuación de urgencia que operarios de la empresa municipal han realizado ante los atascos ocasionados en la red de saneamiento debido, principalmente, a la acumulación de toallitas higiénicas, pañales y algodones que se tiran al váter, colapsan las alcantarillas y atascan las bombas de las estaciones de bombeo de aguas residuales (EBAR).
Dada la lluvia caída estos días y para evitar inundaciones en el centro de la ciudad, Aguas de Cádiz ha examinado la red de alcantarillado y ha comprobado que había gran acumulación de textil y celulosa en la red por lo que han tenido que realizar trabajos extraordinarios de limpieza durante el fin de semana. Concretamente, el sábado y el domingo se retiró la basura que había atascado tres de las cuatro bombas que hay en la EDAR de San Juan de Dios. Cabe recordar que ya se realizaron trabajos de limpieza de choque en los colectores principales del casco antiguo de la ciudad el pasado otoño para evitar precisamente las inundaciones de cara a las posibles lluvias.
Para el presidente de Aguas de Cádiz, “es prioritario que los ciudadanos tomen conciencia de los problemas que ocasionan a la red el mal uso que se hace de los inodoros”. Por ello, Aguas de Cádiz va a volver a lanzar una campaña de educación ambiental –ya hizo una hace unos meses- para concienciar a la población sobre estos riesgos. Además, los técnicos de la empresa municipal van a estudiar posibles mejoras técnicas paliativas para que las bombas de las EBAR se atasquen menos. No es la primera vez que Aguas de Cádiz advierte a la población sobre el buen uso que se debe hacer de los inodoros e insiste en que no hay tirar toallitas puesto que no son biodegradables a corto plazo y producen atascos y roturas en las tuberías, bloqueos en las estaciones de bombeo y problemas en la estación depuradora de aguas.
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