La Policía Nacional de Jerez ha aportado nuevos detalles sobre la muerte violenta de un hombre de 77 años, ocurrida en el interior de su propio domicilio, en la urbanización Residencial Valdespino, situada en la zona de Pozo del Olivar. El caso, que ha causado una gran conmoción en la ciudad, se encuentra judicializado tras la detención de un hombre de 37 años como presunto autor de los hechos.
La relación entre víctima y detenido
Según la investigación, el detenido mantenía un contacto íntimo con el fallecido y acudía de forma habitual a su vivienda. Todos los indicios apuntan a que la muerte se produjo tras una discusión entre ambos que derivó en una agresión física extremadamente violenta, provocando el fallecimiento de la víctima a causa de diversos traumatismos.
La investigación se inició el viernes 12 de diciembre, cuando los familiares denunciaron que llevaban varios días sin tener noticias del hombre. Una vez localizado el cadáver en el interior del inmueble, los primeros análisis realizados por especialistas de Policía Científica y Policía Judicial de la Comisaría de Jerez evidenciaron signos claros de una muerte violenta.
Estas primeras conclusiones fueron posteriormente confirmadas por la autopsia practicada por la médico forense de los Juzgados de Jerez en el Instituto Anatómico de Cádiz, que corroboró la existencia de lesiones incompatibles con una muerte natural.
Amenazas previas y ocultación del crimen
Apenas 24 horas después del hallazgo del cuerpo, los agentes lograron localizar y detener al presunto autor tras reunir pruebas e indicios sobre su participación en los hechos. La investigación sitúa la muerte en la madrugada entre el miércoles 10 y el jueves 11 de diciembre y sostiene que el detenido mantuvo el cadáver en la vivienda, mientras limpiaba el interior de forma exhaustiva para intentar borrar cualquier rastro del crimen.
El análisis del teléfono móvil del fallecido permitió comprobar que había recibido horas antes amenazas de agresión por parte del presunto homicida, en el contexto de discusiones continuadas entre ambos, un elemento que reforzó la hipótesis policial sobre la escalada de violencia previa.
El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 de Jerez durante la tarde del martes 16 de diciembre. Tras su comparecencia, el juez decretó su prisión provisional, ordenando su ingreso en un centro penitenciario de la provincia de Cádiz mientras avanza la instrucción del caso.



