Tras años de espera e incertidumbre, Estella del Marqués verá cumplido el sueño de recuperar su torre, el emblema más representativo de su historia y de su identidad como núcleo de colonización.
El anuncio llegó en un momento cargado de simbolismo. El alcalde, Ricardo Sánchez Vega, aprovechó el acto de coronación de la corte de la Feria 2025, celebrado este jueves, para confirmar que la torre volverá a levantarse. Lo hará en terreno municipal y con el respaldo de la Diputación de Cádiz, un apoyo que garantiza que el proyecto, tantas veces prometido y aplazado, se convierta en realidad.
La desaparición de la antigua torre había dejado un vacío en el paisaje y, sobre todo, en el corazón de los vecinos. El Obispado se comprometió en repetidas ocasiones a reconstruirla, pero la falta de avances alimentaba la desilusión. Finalmente, ha sido la perseverancia vecinal y el impulso de las instituciones locales y provinciales lo que permitirá devolver a Estella su símbolo.
"Mucho más que una construcción"
El regidor insistió en que recuperar la torre es recuperar la esencia y la historia de Estella: "Hoy puedo anunciar con gran orgullo que Estella del Marqués volverá a tener su torre. Una torre que no es un simple edificio, sino el corazón de nuestro pueblo, el punto de referencia que nos recuerda de dónde venimos y quiénes somos. Para un pueblo de colonización como el nuestro, la torre representa mucho más que una construcción: es un símbolo patrimonial e histórico fundamental, que forma parte de nuestra memoria colectiva y de nuestra identidad".
En ese sentido, el alcalde explica que "recuperarla significa devolverle a Estella del Marqués su dignidad, su esencia y su historia. Queremos que los más pequeños y pequeñas crezcan mirando a la torre como lo hicimos nosotros, que la sientan como suya, como el emblema que une a todos los vecinos y vecinas. Gracias al apoyo de la Diputación de Cádiz y al esfuerzo de todos, muy pronto podremos ver de nuevo nuestra torre en pie, orgullosa y firme, como siempre debió estar".
Como se recordará, la torre de la iglesia de San Miguel de Estella fue demolida en 2018. Entonces se explicó que el nuevo campanario debía ser idéntico al original, por exigencias urbanísticas, aunque con mejoras técnicas que garantizarían su durabilidad. La estructura, compuesta de cinco pilares de hormigón y cerramientos de ladrillo, se proyectaba en su totalidad en hormigón para resistir mejor el paso del tiempo.