Han pasado ya diez días desde que Israel interceptó en aguas internacionales la Global Sumud Flotilla, una misión humanitaria integrada por 42 embarcaciones que zarpó desde distintos puntos del Mediterráneo con el objetivo de romper el bloqueo a la Franja de Gaza y hacer llegar ayuda humanitaria a su población. Aunque la mayoría de los activistas fueron deportados en los días posteriores, seis permanecen aún detenidos en Israel. Entre ellos se encuentran la española Reyes Rigo, los marroquíes Aziz Rhali y Abdeladim Ben Draoui, y los noruegos Eline Norli, Samuel Rostol y Christoforos Schuff O’Moore.
Entre los detenidos figura Aziz Rhali, un conocido activista marroquí vinculado a la ciudad de Jerez, donde preside la asociación Foro Mediterráneo por los Derechos Humanos, con sede en Olivar de Rivero. Según su entorno, Rhali se encuentra en huelga de hambre desde su detención. Una abogada le ha visitado y dice que no se encuentra en buen estado de salud.
Doctor en Farmacia, fue presidente de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) y vicepresidente de la Federación Internacional de Derechos Humanos. También es miembro del Movimiento por la Salud de los Pueblos, del Comité Internacional del Foro Social Mundial y ha colaborado con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Durante su trayectoria, el activista ha trabajado como voluntario en zonas de guerra como Irak (2003) y Líbano (2006), enviando medicamentos y apoyo médico a hospitales. Además, apadrina desde hace años a tres niños palestinos.
Desde Jerez, sindicatos como CNT y colectivos migrantes han calificado su arresto de “secuestro” y han convocado concentraciones para exigir su libertad.
Antes de zarpar, el propio Dr. Aziz Rhali había publicado un manifiesto en el que advertía: “Ha llegado el momento de mantenerse firmes”. En el texto denunciaba que Israel se disponía “a cometer un crimen a plena luz del día: interceptar la Flotilla Global Sumud, lanzar un comando armado para secuestrar a las tripulaciones de más de cuarenta barcos humanitarios y retenerlas en una prisión militar durante varios días”.
