Naé es una profesora interina en Andalucía que ha pasado por multitud de centros como docente de Lengua y Literatura. Entre ellos, en La Muela, Vejer. Pero también en Fuengirola, Monachil... Pero este inicio del curso no está trabajando. Porque se ha decidido embarcar en la flotilla Global Summud que está yendo a Gaza tras zarpar hace aproximadamente un mes. Con muchos problemas, porque varios barcos se han quedado por el camino -en realidad muchos son veleros apenas preparados para cruzar el Mediterráneo-, desde que salieron de Barcelona han logrado la atención mediática pero pelean por el objetivo más importante: abrir un corredor humanitario para que entre ayuda en Gaza.
La población gazatí está viviendo un infierno desde 2023, cuando las represalias por los ataques de Hamás han derivado en un auténtico genocidio, ya que son más de 60.000 muertos y las cifras siguen subiendo. Y con miembros del Gobierno israelí prometiendo borrar a la población de la zona. El último avance es la reunión de Benjamin Netanyahu con Donald Trump en la Casa Blanca. Con todo, eso no está cerca de concretarse ni parece una verdadera solución definitiva para el corto o para el largo plazo y la flotilla sigue su rumbo, a apenas unos kilómetros ya de la costa. Son las horas más tensas. Naé atiende por llamada de whatsapp a lavozdelsur.es, con auténticos problemas de cobertura y tirando del poco internet que tienen en el mar.
En estos momento, "estamos en alerta", explica Naé. "Esta noche hemos tenido un par de momentos de alerta, estamos haciendo guardias para prestar toda la atención posible, y dos buques israelíes han estado intimidando a los barcos". Pero es clara. Porque "lo que nos pase es anecdótico en comparación con lo que vive cualquier persona de Palestina, en Gaza o Cisjordania. Y todas las vidas valen lo mismo. O deberían valer lo mismo".
En estas próximas horas debería abrirse el esperado corredor humanitario que permita la entrada de alimentos y otros elementos de primera necesidad para los habitantes de Gaza. "Es lo que esperamos y lo que vamos a hablar poruqe es urgente dentro de esta estrategia de no violencia". En su barco van varias personas con perfiles para ayudar a la población. Desde dos abogados especialistas en derecho humanitario internacional hasta una mujer que suele llevar barcos para salvar a migrantes en el Mediterráneo ("que básicamente están siendo asesinadas por las políticas migratorias de la UE"), o un cirujano, habitual en zonas de conflicto.
Todos ellos preferirían estar "en cualquier otro sitio", pero sienten que lo que hacen pueden cambiar las cosas, porque "los gobiernos no están haciendo su trabajo", que debería empezar con romper relaciones con Israel y llevar a cabo un embargo de armas. Lo que más temen es que la sociedad deje de tener los ojos puestos en Gaza, porque esto es "un genocidio, un apartheid, una colonización", y esta última se perpetuaría de llevarse a cabo el acuerdo de Trump con Netanyahu. "Lo que se está anunciando es que en el mundo cualquiera puede atacar a cualquier pueblo y el resto va a mirar de manera cómplice". Y no es el mundo que quiere. "Por eso estoy haciendo todos los días llamadas con centros de menores, institutos, colegios", en los que contactan en directo por videollamada. "El curso no debe empezar con normalidad mientras hay niños que pueden ir a la cárcel con 12 años en Gaza, que pasan por checkpoints diarios, chicos y chicas que están siendo desplazadas. El mundo puede aportar para pararlo".
Israel ya ha dicho que actuará contra los miembros de la flotilla al desembarcar o incluso antes. Por eso son las horas cruciales. Hablan de detenciones o expulsiones directas. "Si lo hacen será un secuestro contra el derecho internacional, no hacemos nada ilegal, ellos sí hacen algo ilegal. Si lo hacen, entraré en huelga de hambre".
Este jueves día 2 de octubre hay "por fin una huelga estudiantil" en Andalucía convocada por el Sindicato de Estudiantes y el día 4 manifestaciones para visibilizar de nuevo la situación, en multitud de municipios de la comunidad.
