Sebastián Carrasco Ruiz inauguró como alcalde de Jerez, en 1947, durante el periodo franquista, una tradición que se ha mantenido vigente hasta este mismo Lunes Santo de 77 años después.
Pese a que hace unos años el anterior gobierno del PSOE de Mamen Sánchez titubeó en determinados momentos con el mantenimiento de esta renovación del voto al Cristo de la Viga —dejando de ir al acto o sacándolo de la Catedral, sede canónica de la hermandad— como alcalde honorario de la ciudad, lo cierto es que de un modo u otro se siguió llevando a cabo.
Renovado el gobierno municipal tras las últimas elecciones, este Lunes Santo se ha celebrado nuevamente este acto simbólico con toda solemnidad y con la nutrida presencia del ejecutivo local del PP y de los dos concejales de Vox, ausentándose los ediles de PSOE y La Confluencia. También ha estado presente en la antigua colegiata de San Salvador el comisario de la Policía, Francisco José García Carrasco, así como por supuesto la plana mayor de la hermandad de La Viga, comandada por su hermano mayor Eduardo Salazar.
"Para mí es un honor como alcaldesa de Jerez, en nombre de la Corporación y en nombre de toda la ciudad de Jerez, poder renovar el voto a los pies del Señor de La Viga; mi agradecimiento eterno a la hermandad por darme también la oportunidad de convertir a toda la ciudad de Jerez en hermanos y hermanas honorarios de vuestra hermandad. Es un auténtico honor, pero también una extraordinaria responsabilidad que asumimos con humildad y devoción, porque somos conscientes de que hemos puesto a los pies del Señor de La Viga a toda la ciudad de Jerez", ha exclamado la regidora jerezana tras la entrega del bastón de mando.
Galería de fotos de la entrega del bastón de Alcaldía del Cristo de La Viga
"Hemos puesto a sus pies —ha abundado— todos los sufrimientos de los jerezanos, pero también las esperanzas. No es un acto simbólico, le pedimos al Señor de La Viga que no nos deje nunca, que haga como hizo siempre, estar con los jerezanos en los momentos difíciles de nuestra ciudad. Cuando he estado reclinada ante el Señor le he pedido de corazón, con devoción, que cuide de Jerez, que proteja nuestra ciudad, que no nos abandone nunca, que nos ampare, que nos dé aliento en los momentos difíciles, esperanza en los momentos difíciles y que también sea el soporte de nuestra ciudad".
Tras recordar que este gesto de la ciudad comenzó hace 77 años con Sebastián Carrasco como regidor, pero rememorando también que la Virgen del Socorro —cotitular de la hermandad de La Viga— es copatrona de la ciudad desde hace 400 años, "se ha creado una alianza que no se va a romper nunca; el Ayuntamiento de nuestra ciudad está muy cerca, a escasos metros, y creo que estar tan cerca hace que eso se note hoy. Lo digo con la seriedad que requiere este acto".
"Hoy todos los que gobernamos esta ciudad sentimos el peso de la responsabilidad de compartir este bastón; entregar este bastón al Señor de La Viga nos da fortaleza porque sé que nos va a iluminar, sé que nos va a guiar por el buen camino, sé que nos va a corregir cuando nos tenga que corregir. Y os aseguro que, con toda la humildad del mundo, corregiremos cuando nos equivoquemos", ha ultimado especialmente emocionada, casi al borde de las lágrimas al final de su intervención.
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