El Ayuntamiento de Cádiz no conoció en la Inspección Técnica de Edificios (ITE) realizada en 2019 la existencia del minipiso de la entreplanta donde falleció este viernes un hombre de 39 años en un incendio. La citada entreplanta se había dividido en cuatro pisos diferentes, sin licencia de obras para ello, según informa Diario de Cádiz.
La finca de la calle Sacramento se convirtió en una trampa mortal para el finado, de 39 años, que pidió auxilio a través de las rejas que se oyeron en la calle, pero sin que nadie pudiera hacer nada. Policía ha abierto investigación sobre la muerte, pero también lo hará Urbanismo.
Con unos 30 metros cuadrados, la vivienda era una especie de estudio donde fue imposible aislarse del humo tras el incendio. El incendio se originó en el pequeño salón. De haber más personas en los otros minipisos, según Bomberos, podría haber sido una tragedia mayor. El hombre, según Bomberos, murió con los brazos en las rejas de la calle, en una imagen dantesca donde toda la casa se encontraba carbonizada.
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