La Hermandad de Jesús Caído de Cádiz ha comunicado este miércoles el fallecimiento de José Antonio Sardiña, conocido entre sus allegados como “Tato”. Tras cuatro años de lucha contra una enfermedad, Sardiña ha fallecido dejando una profunda huella entre los miembros de la comunidad marianista.
Miembro de las Fraternidades Marianistas de Madrid, Sardiña se incorporó hace varios años a la Hermandad de Jesús Caído en Cádiz, participando activamente en la cuadrilla de Nuestro Padre Jesús Caído. Inicialmente desempeñó labores como cargador y posteriormente como “aguaor”, encargándose de ofrecer agua a los hermanos durante las procesiones, tarea que realizaba con dedicación y afecto.
Durante los últimos años, Sardiña se mantuvo firme en su compromiso con la hermandad, asistiendo cada Martes Santo a Cádiz para acompañar a la imagen del Señor del Parque y a la Virgen de los Desamparados. A pesar de la enfermedad, participaba en las celebraciones con emoción y con el apoyo de sus compañeros, quienes destacan su entrega y entusiasmo por mantener vivas las tradiciones de la hermandad.
El pésame a la familia
A lo largo de este tiempo, su esposa, María Arróspide, estuvo a su lado como acompañante constante, brindándole apoyo y fortaleza. La hermandad ha destacado la importancia de su familia en este periodo, enviando un mensaje de solidaridad a María y a sus hijos, Pablo y Fernando, en estos momentos de pérdida.
Desde la Hermandad de Jesús Caído han expresado su pesar y han resaltado la devoción de Sardiña, así como la vida de fraternidad que cultivó con sus compañeros. La comunidad confía en que su memoria perdurará y celebra la fe compartida por la que Tato dedicó tantos años de su vida.


