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Cientos de jóvenes acuden a Ifeca a la II edición de esta cita con el mundo del videojuego, el manga y el rol. "Hay que ser muy friki para estar aquí", dice uno de los voluntarios del evento.

Algunos llevan haciendo cola desde las ocho de la mañana, otros han desayunado a toda prisa con tres simples galletas para llegar a tiempo a la esquina del parque González Hontoria. Los más rezagados se han dedicado a culpar la lentitud de sus padres con el coche, mientras que otros se muestran eufóricos con su entrada en la mano. Lo importante es que al final han llegado. Cientos de jóvenes se dan cita en el palacio de congresos de Ifeca para celebrar la II edición de la SuperCon. Este evento reúne durante tres días todo lo relacionado con la cultura del videojuego, el manga y anime, y los juegos de rol.

Más actividades en un espacio mucho mayor es la principal premisa de esta cita que pretende convertirse en un referente andaluz de igual manera que el Salón Manga ya lo es. En tres jornadas los asistentes pueden disfrutar de talleres, charlas, concursos de cosplay o torneos de videojuegos. Por otro lado una de las actividades más interesantes es la del Callejón del Artista, donde las jóvenes promesas del cómic, el manga o la ilustración, muestran y venden sus trabajos al público.

Marina y Jorge han sido de los primeros en acudir al recinto jerezano. Vestidos con unos simples vaqueros y sus respectivas camisetas de súper héroe, llevan en sus bolsillos los ahorros de todo un mes para adquirir algunos de los productos que se pueden comprar en esta feria. Peluches, carteras o llaveros, en los puestos montados en la SuperCon hay todo tipo de cosas del gusto de los más frikis. “He desayunado muy rápido esta mañana para llegar a tiempo con mi amigo. He podido ahorrar 50 euros este mes para poder comprarme algunos de los caprichos que podré encontrar aquí. En este evento lo pasamos realmente bien porque todo lo que hay está relacionado con las actividades que nos gusta hacer en nuestro tiempo libre”, asegura Marina.
El interior de Ifeca está vestido de gala para la ocasión. Múltiples monitores conectados a videoconsolas dan la bienvenida a los más viciados de los videojuegos mientras que los miembros de la asociación La Forja de los Sueños invitan a los asistentes a participar en algunas partidas de rol narrativo o a bailar en la plataforma de baile virtual. Mientras Sara pasea con un cartel de Se dan Abrazos Gratis, un grupo de jóvenes alucina al ver en puesto una colección de peluches de la saga Pokemon.

Adrián es el presidente de La Forja de los Sueños, una asociación sin ánimo de lucro que organiza actividades culturales enfocadas al rol. “Estamos situados muy cerca del colegio Blas Infante. Nosotros nos dedicamos a realizar actividades más centradas en el mundo oriental o en la cultura alternativa. Organizamos partidas de rol narrativo o en vivo además de jugar a juegos mesa en grupos o incluso para los más pequeños ofrecemos un pinta caras”.

La SuperCon es una manera también diferente de darse a conocer dentro de este tipo de cultura. Rafael Galán, ofrece en su puesto artesanal unos peculiares objetos realizados con Hama. De aspecto como los pixeles de un videojuego, estas bolitas de plástico sirven para dar rienda suelta a la imaginación y diseñar de manera idéntica algunos de los héroes de los videojuegos. “Esta cita tan amena me viene bien para vender los productos que hago. Con la Hama se pretende innovar y sacar productos originales. El público al que enfocamos nuestro trabajo es especializado pero es algo que gusta mucho. Se requiere paciencia para hacer algunos de estos diseños siempre dependiendo del tamaño”.

Los voluntarios de la SuperCon son parte importante dentro de este evento. Colaboran durante el fin de semana participando en labores dedicadas a un mundo que es parte de su pasión. María Céspedes es una de las voluntarias que vive con especial emoción el poder echar una mano. “Hay que ser friki para estar aquí porque la labor que hacemos te tiene que gustar. A nosotros nos asignan unas funciones en el recinto y tenemos que ir revisando que todo esté organizado. Si hay que colocar una planta o animar a los asistentes a que participen en alguna actividad lo hacemos. Hay que tener cuidado también con los materiales ya que no deben estropearse”.

La cita culturtal cobra también cierta importancia en el panorama internacional. Malcolm un inglés nacido en Leeds, se dedicar a recorrer con sus productos este tipo de citas alternativas. Después de asistir a la feria internacional del punk en Barcelona, llega a Ifeca con su tienda SteamRetro, un espacio donde el punk y la época victoriana se dan la mano para ofrecer ropa y objetos muy diferentes de los que se pueden encontrar en cualquier centro comercial. “Nací en Leeds pero vivo en un pueblecito de Alicante. No tengo una tienda física solo un taller que abrí hace cuatro años y actualmente se ha convertido en mi vida. Aquí ofrezco algo muy diferente como es ropa futurista realizada con tela pero mezclada con engranajes o maquinaria. Esta labor está hecha para un público muy específico pero hay gente cada vez más curiosa que se dedica a comprar estos productos”.

El Callejón del Artista cuenta este año con la asistencia de algunos ilustradores conocidos como Antonio Ruíz. Este malagueño fue galardonado el año pasado al mejor humorista gráfico revelación de Málaga gracias a su obra Piratas del Jengibre. El segundo volumen de esta colección ya va por la segunda edición por lo que el éxito poco a poco está comenzando a llamar a su puerta con su propio esfuerzo al dedicarse a la autoedición de sus productos. “No hay ninguna editorial que esté detrás de lo que hago. Es un cómic autoeditado que le empezó a gustar a la gente. El segundo volumen lo he podido sacar porque a la gente le ha encantado el primero que ya está cerca de la tercera edición. Desde pequeño siempre me gustó dibujar y contar historias. Actualmente estoy trabajando en otro cómic más original para poder llegar a otras personas a las que contarles otras historias”.

Alba es una joven onubense que a pesar de su inexperiencia en estos eventos, no pierde la ilusión ni su sonrisa a la hora de exponer sus diseños. Esta ilustradora de ojos azules estudia Bellas Artes en Sevilla y no le importa pasar por un mercado artesanal a un evento tan diverso como la SuperCon. “Esta cita le viene bien a la gente joven para promocionarse. Yo hago ilustraciones estampadas al agua que hago en clase o en mi casa. Es la segunda vez que cojo la maleta con mis ideas para mostrarlas al público”.

La ambición de esta cita no tiene límites y a día de hoy es junto a la SuperCon de Sevilla un referente del ocio alternativo para la juventud. Las expectativas contemplan superar los 10.000 visitantes de la pasada edición, ya que ha habido un alto número de entradas vendidas con antelación o sorteos de invitaciones en las diversas redes sociales. De igual modo aquellos aficionados que sean de fuera de Jerez y deseen acudir a la cita, pueden adquirir sus billetes de tren con una rebaja del 30%.

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Borja García Tejero

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