¿A qué suena la sierra de Cádiz? ¿Qué canciones escuchan los vecinos de los municipios de la serranía de Ronda?. En la quietud de las laderas y en las calles donde habita el sosiego irrumpen desde tiempos inmemoriales sonidos que componen un mapa musical extraordinario. Infinidad de archivos sonoros deambulan por las listas de reproducción de las familias -antes grabados en vinilos o casetes- que un ubriqueño y sus amigos se han propuesto recopilar.
A Alberto Oliva, de 36 años, -junto a otros compañeros- se le ocurrió hace más de un año que sería interesante crear una fonoteca virtual con el mayor número de canciones posible. "Estaba charlando con unos amigos y nos gusto la idea de hacer una base de datos donde estuviera recogida la música de nuestra zona", comenta este diseñador que se dedica al mundo audiovisual.
El proyecto sin ánimo de lucro, abierto y participativo, no surge por casualidad. En más de una ocasión han grabado y producido canciones y se consideran fieles "amantes de la música". Según explica Alberto a lavozdelsur.es, "tenemos otros trabajos y algunos hacemos música, estamos involucrada en ella y nos interesa el rollo de la documentación y la investigación, es la parte que nos atrae".
Su objetivo no es otro que investigar las canciones que han acompañado a las familias en los peores y mejores momentos de sus vidas. Para ello, ha dado rienda suelta a Benaserra- Bena (“hijos de” en árabe) y serra (“sierra” en latín)- rincón en internet donde busca aglutinar grabaciones de todas las épocas y estilos, desde Ska & Reggae hasta Blues y música religiosa.
"Intentamos que no sea solo de un mismo pueblo"
Benaserra busca hilvanar una memoria musical de dos comarcas que comparten identidades culturales afines. Su mirada se fija en los oidos de los habitantes de Alcalá del Valle, Algar, Algodonales, Arcos de la Frontera, Algatocín, Alpandeire, Arriate, Atajate, Benaocaz, Bornos, Benadalid, Benalauría, Benaoján, Benarrabá, Cortes de la Frontera, Cartajima, El Bosque, El Gastor, Espera, Faraján, Gaucín, Genalguacil, Grazalema, Igualeja, Jimera de Líbar, Jubrique, Júzcar, Montejaque, Montecorto, Olvera, Prado del Rey, Puerto Serrano, Parauta, Pujerra, Ronda, Serrato, Setenil de las Bodegas, Torre Alháquime, Ubrique, Villaluenga del Rosario, Villamartín y Zahara de la Sierra.
"Ahora mismo, sobre todo, tenemos archivos de Ubrique, porque somos de aquí, pero intentamos compensar la fonoteca para que no sea solo de un mismo pueblo", explica Alberto que comenta que el género más abundante es el rock.
La memoria se va forjando gracias a la colaboración de ciudadanos, instituciones, ayuntamientos, radios locales o músicos que les envían sus aportaciones. La pieza más antigua que ha pasado por sus manos es la grabación de un etnomusicólogo datada de 1952 que pasó por Gaucín y otras partes de España. "Visitó ferias de pueblo y grabó a una muchacha cantando villancicos", detalla el ubriqueño.
En los ultimos días, lo que más ha recibido son cintas de carnavales de los años 80 y 90. Cuando al grupo le llega una nueva propuesta para la fonoteca, se dedican a clasificarlas indicando el álbum o sesión de grabación, el nombre del autor o grupo, el nombre del dicos y el año o la década si no es exacta. Todo ello, con el objetivo de que los curiosos que entrenten en la web, puedan filtrar los resultados por comarca, década y género musical.
"Queremos hacerlo accesible y reproducicle para todas las personas", explica el ubriqueño al que le encantaría revelar más material disperso por la zona. "La idea sería que recibiéramos más cosas. Ahora mismo contactamos con personas a través de redes sociales para pedirles que participen", señala.
Inmersos en desentrañar un legado musical desconocido, los compañeros investigan y abren sus oídos para ordenar creaciones perdidas y rescatarlas del olvido. Intentan definir la memoria musical y ver qué patrones comunes pueden hallar, aunque Alberto considera que esta no difiere, a priori, de la de las ciudades. "Creo que todos hemos pasado por la influencia de Estados Unidos y del mundo anglosajón. Todas las comunidades estamos impregnadas de esa musica. Por eso hay desde Hip Hop hasta los temas más folclóricos y tradicionales, como el flamenco o los carnavales", expone.
Las personas interesadas en poner su granito de arena a este proyecto pueden enviar sus maquetas, discos editados y sesiones de grabación tanto en formato digital como en otros formatos físicos. Los archivos de audio digital MP3, WAV, AIFF o FLAC se pueden subir a la web mientras que, para facilitar el resto, es posible ponerse en contacto con los creadores de la iniciativa a través de fonotecabenaserra@gmail.com.
Aceptan discos vinilo de 7, 10 y 12 pulgadas, casetes, cintas de bobina abierta (magnetofón) y compact disc (CD). "Los digitalizamos con una platina de casete que tengo en casa", comenta el ubriqueño que recuerda que es importante que los archivos sonoros deben ser aportados por el dueño legal de la obra o tener su consentimiento para añadirlo a la fonoteca. "El juego es investigar".
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