Según los datos proporcionados por Instituciones Penitenciarias el pasado viernes, las cárceles de Andalucía presentan cuatro focos de covid-19 activos, con 154 positivos y una persona hospitalizada. Los brotes se localizan en el centro de Huelva, con 27 casos, en la prisión de Puerto III, con 24 positivos, en la cárcel de Sevilla II de Morón de la Frontera, con seis afectados, y en Algeciras, con 97 positivos y un hospitalizado.
De hecho, durante la pasada semana se han contabilizado en las prisiones andaluzas más de 150 positivos pero Instituciones Penitenciarias ha asegueado que son "asintomáticos o con sintomatología leve", encontrándose solo uno hospitalizado "por patologías previas". Es por ello que como medida preventiva, se han suspendido las visitas especiales en las cárceles de toda Andalucía, tanto aquellas que se realizan vis a vis y las ordinarias en la cárcel de Huelva.
En declaraciones a los medios que ha recogido Europa Press, Instituciones Penitenciarias ha asegurado que "la situación va de capa caída" y ha pronosticado que, dentro de "dos o tres semanas, los niveles volverán a la situación previa a la quinta ola si todo sigue de la misma forma".
Por su parte, el brote de contagios de Huelva ha afectado a 27 personas "asintomáticas o que presentan síntomas leves" y todos están bajo control sanitario. Lo mismo ha ocurrido en el centro penitenciario de Morón, Puerto III y Algeciras, donde todos los contagiados, salvo un usuario que está ingresado, se han mostrado sin síntomas o con síntomas leves.
Las medidas de seguridad de las cárceles andaluzas contemplan la suspensión de los permisos de salida para la prisión, la puesta en cuarentena los positivos en módulos de aislamiento y el tratamiento de forma "compensatoria" a las personas que tienen que estar en cuarentena, "con más llamadas que pueden realizar".
El organismo ha destacado que se "realizan cribados masivos" en varios módulos de las prisiones andaluzas "en pos de mantener y garantizar la seguridad en el centro", que además sirven "para detectar posibles positivos y contagios".
Tras la detección de una persona que muestra síntomas como tos o fiebre, el protocolo dice que hay que hacer las respectivas pruebas de control de coronavirus. Si el usuario es positivo, se realiza "un seguimiento de contactos estrechos" que haya podido tener, que se saldan con las respectivas pruebas de control covid. El siguiente paso es el aviso a la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía del positivo, para el tratamiento sanitario del mismo, así como aislar a la persona que "deja de hacer vida en común" con el resto de usuarios.
Las cárceles andaluzas cuentan con médicos de prisión, equipos de protección individual y con un "protocolo normalizado de actuación" debido a la situación de pandemia. "Sabemos que la población es muy delicada de salud, por ello extremamos la precaución cada vez que se producen estos casos", sostienen desde Instituciones Penitenciarias.
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