Las duras imágenes se hicieron virales hace unas semanas. En un vídeo, se podía a ver a un trabajador de la perrera Don Animal, empresa que presta servicio en el Rincón de la Victoria, en la provincia de Málaga, capturando con un lazo a una gata de forma violenta.
El animal, tras este episodio, terminó muriendo, unos hechos por los que nadie quiere hacerse responsable. El Partido Animalista Pacma publicó el pasado 12 de enero en sus redes sociales el vídeo que despertó la indignación de los usuarios, que pudieron observar cómo un trabajador de la perrera Don Animal, que actualmente tiene convenio con el Ayuntamiento de Rincón de La Victoria, capturaba a una gata con un lazo a pesar de tratarse de un animal manso.
Pacma aseguró que recurriría a la vía judicial y que denunciaría penalmente por un posible delito de maltrato animal a todos los presuntos responsables de la muerte de la gata capturada con lazo y fallecida a finales de diciembre, un trámite que sigue en proceso.
Sin embargo, el último pleno del Ayuntamiento no ha dejado indiferente a la formación política animalista ya que, al ser preguntado por los acontecimientos que derivaron en la muerte del animal a causa de las heridas producidas, éste elude responsabilidades.
Al ser cuestionados por un grupo político que se interesó sobre el desarrollo de los hechos, el Consistorio afirmó que, durante las horas posteriores a la captura, la gata no presentaba signos físicos ni comportamentales de maltrato y que el instrumento utilizado (el lazo) está “aprobado” para tal fin. Además, afirman que el animal fue “examinado” por un veterinario antes de hacerse entrega a la protectora que se hizo cargo de ella pocos días antes de su muerte, pero esta información ha sido desmentida por la persona que la recogió.
El veterinario que realizó el informe tras el empeoramiento del estado de la gata publicó en sus redes sociales: “Espero que este crimen no quede impune y ver a su verdugo en un juzgado”, publicaba el profesional en sus redes.
Pacma asegura que Don Animal es una empresa que se halla, constantemente, envuelta en polémicas tanto por presuntas irregularidades en el contrato con el Consistorio como por el estado en que se encuentran los animales del zoosanitario que regenta, pero que aún así es defendida “a capa y espada” por el Ayuntamiento de Rincón de La Victoria que, señalan, tratan de evadir la realidad y gravedad de los hechos.
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