Muere una bebé prematura en el Hospital Donostia de San Sebastián por un "error farmacológico", según ha informado El Correo, que ha detallado que a la pequeña le suministraron el anestésico Propofol en lugar del suero alimenticio Smoflipid durante “al menos 48 horas”.
El estado de salud de esta bebé y la de otra recién nacida empezó a empeorar al tener secuelas de este suministro. Ambas estaban en la incubadora cuando se detuvo el sumistro de este anestésico, un hecho que de inmediato se comunicó a las familias.
Sin embargo, a los tres días, unas de las bebés falleció al haber ingerido grandes cantidades de Propofol, según indicaron los analisis de sangre que le realizaron el día de su muerte. Fue la madre del bebé la que avisó a una enfermera de que su hija estaba demasiado quieta, aunque la enfermera la tranquilizó. La bebé que sobrevivió, necesita una sonda permanente de oxígeno como consecuencia de este suministro.
Ante esta situación, los familiares de las recien nacidas reclaman indemnizaciones, que serían de 150.000 euros para cada uno de los padres de la bebé fallecida, 60.000 euros para la madre de la pequeña que ha sobrevivido y 400.000 para ella.
Comentarios