Aunque había borrado todo rastro de su relación con Dani Alves, Joana Sanz, la todavía pareja del brasileño, ha dado un giro imprevisto a los acontecimientos y ha acudido a la cárcel para tener un vis a vis con el jugador.
Alves, en prisión preventiva tras ser acusado de violar a una joven de 23 años, ha estado durante casi una hora junto a Joana, que a su salida de prisión ha manifestado que "no voy a dejarlo solo en el peor momento de su vida".
La que sigue siendo pareja del futbolista ha negado, tras su visita al brasileño, que tenga intención de divorciarse en estos momentos. A pesar de que la situación cada vez se le complica más al jugador, Joana prefiere esperar acontecimientos antes de tomar una decisión final sobre el futuro de su relación. La modelo canaria, de 29 años de edad, no va a mover ficha hasta que la jueza no dicte una sentencia sobre el caso.
Pero además de esta visita sorpresa, lo que está dando que hablar en las últimas horas es el presunto trato de favor que podría estar recibiendo Alves en la cárcel. "Le acompañan cuatro funcionarios al patio ,que lo tienen escoltado y lo tienen aparte, solo. De momento está apartado porque es un caso exclusivo. Como es un deportista conocido...", ha señalado una persona que prefiere mantener su identidad en el anonimato.
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