La intención del Gobierno de hacer pagar a la Iglesia el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) se refiere solo a las propiedades que no están a disposición de la sociedad para su culto o actividades sociales. Así lo ha puntualizado la ministra en funciones de Hacienda, María Jesús Montero.
"De lo que se trata es que, por supuesto, los lugares de culto o en los que se desarrolla una acción social tengan las mismas exenciones, pero que en otras pertenencias de la Iglesia que no están desarrollando esta tarea hay que replantearse esa contribución que va a los Ayuntamientos", ha afirmado la ministra en funciones en una entrevista realizada en Antena 3.
El Gobierno plantea revisar el uso que la Iglesia viene realizando del patrimonio eclesiástico y conocer así los inmuebles concretos que posee. Por ello, la titular de Hacienda ha apuntado la necesidad de realizar "la categorización de cuáles son los patrimonios que están al servicio de los ciudadanos y cuáles forman parte del patrimonio de la Iglesia que, en estos momentos, tienen una exención y que parece que habría que revisar". Montero también ha recordado, que la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, en su visita al Vaticano ya expresó la voluntad del ejecutivo español de revisar la tributación de la Iglesia.
Por otra parte, ha negado que en esta revisión de la fiscalidad de la Iglesia vaya ha afectar a la casilla de la declaración de la renta destinada a asignar voluntariamente el 0,7 % de la cuota íntegra del IRPF a la Iglesia católica. No obstante, ha recordado que dicha casilla sirve para sufragar el funcionamiento orgánico de la Iglesia, pero no su acción social, que iría por la otra casilla de asignación a fines de interés social, en la que se incluiría por ejemplo a Cáritas.
Comentarios