Una trabajadora de Renfe anuncia a través de un megáfono que los pasajeros del tren con destino a Madrid de las 6:40 horas pueden ir pasando por la vía 4. El único problema es que son más de las 10 de la mañana. Sus pasajeros son de los pocos que han tenido suerte y saben con certeza que su viaje comenzará en unos minutos. La hora de llegada es una incógnita mayor.
Han pasado ya 48 horas del peor momento que se vivió con la DANA el pasado domingo y la Estación de Tren de Santa Justa, en Sevilla, sigue siendo un caos. Multitud de afectados se amontonan en las entradas hacia las vías. Alguno directamente espera tumbado en el suelo o toma el aire en la puerta sin demasiadas esperanzas. Los mostradores tienen una fila que ronda las 100 personas. La situación es tan anómala que en uno de los rincones que queda libre dos jóvenes juegan al PC.
Son muchos los que esperan algún tipo de información. Otros, simplemente, esperan para que se cumpla lo que les ha transmitido Renfe. Durante la noche del lunes la compañía mandó cientos de mensajes por SMS o correo electrónico avisando de los nuevos horarios o de las cancelaciones. Sin embargo, la información en algunos casos era incorrecta.
Carmen y Antonia llevan en Santa Justa desde las 5 de la mañana para coger un tren a las 6:30 que las lleve a Madrid para trabajar. "Nos han dicho que salía a las 10:30", comentan. Anoche, el mensaje que recibieron hablaba de cancelación. Aun así, han decidido ir a primera hora a la estación y se han encontrado que realmente el tren no estaba cancelado, sino que su salida se iba a retrasar algunas horas. La situación la llevan con resignación, "hemos perdido la mañana de trabajo, pero hay gente que ha perdido la vida".
Lluis Albert y Neus han tenido menos suerte. Ambos tenían que cruzar la península en tren el lunes a las 15 horas. Un día después se encuentran en Santa Justa sentados en el suelo y habiendo tenido que pagar una noche de hotel extra de la que seguramente nadie se hará cargo. Su tren no tiene hora de salida y ya buscan alternativa. "Si sigue así, alquilaremos esta tarde un coche hasta Zaragoza".
La fila de los mostradores de información mide decenas de metros. En ella se encuentra Carolina bastante desesperada. Su viaje lleva un día de retraso y se dispone a cambiar de nuevo los billetes para emprender la aventura el jueves, cuando previsiblemente la situación ya se haya normalizado. Debía haberse puesto en marcha el lunes a las 10 de la mañana, pero le cambiaron el billete para este martes. A última hora del lunes la informaron de que se cancelaba. Su destino final es Pamplona y para ello necesita tres trenes y dos trasbordos.
"Tengo tres trenes, dos de Iryo y el último de Renfe. De Sevilla a Madrid, de Madrid a Zaragoza y de Zaragoza a Pamplona. Cuando me cancelaron el primero tuvo que cambiar los demás", señala a lavozdelsur.es.
Justo detrás se encuentra Ana con una historia rocambolesca. El domingo salió en un Iryo a las 18 horas con destino a Madrid, también por temas de trabajo. Ha perdido tanto el lunes como el martes. Tras varias horas de viaje con incidencias, poco antes de llegar a Toledo el tren se dio la vuelta. Regresó a Santa Justa a altas horas de la madrugada. "Me lo habían cambiado al que sale a las 10 horas y esta mañana me han avisado de que se ha cancelado. Estoy a ver si me reubican".
La información de Renfe
El lunes por la noche, Renfe anunció que la conexión entre Madrid y Sevilla se reestablecería a las 10:30 de la mañana. En un comunicado posterior a primera hora del martes, la hora de circulación se retrasaba a las 11 horas. En dicho comunicado, la compañía ha asegurado que "todos los viajeros de los trenes afectados serán reubicados en trenes posteriores para facilitar su desplazamiento". En cualquier caso, los afectados pueden anular o cambiar sus billetes sin coste.
En total la compañía ha movilizado a 1.500 trabajadores para solventar las incidencias y ha emitido más de 75.000 mensajes para que casa usuario conociera la situación. Son 50.000 las personas que se ha acogido a la opción de modificar o cancelar sus billetes mientras que 150.000 han realizado ya sus trayectos. La situación más complicada se sigue viviendo en el tramo entre Toledo y Madrid. En otras zonas afectadas, Renfe ha puesto en marcha un servicio alternativo por carretera.
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