El doctor Julio Armas, médico de urgencias en el Hospital del Vinalopó en Elche, comparte en su cuenta personal de Twitter sus vivencias y sus sensaciones en su lugar de trabajo. El lugar donde nadie quiere estar en plena tercera ola. El sanitario, que se mueve en un ambiente de estrés y con una trayectoria de once años, decidió usar la red social para concienciar a la población de la gravedad. "Hay historias que ayudan a otros a tomar consciencia de lo crítica que es la situación actual", ha expresado en la Cadena SER.
Hace unos días sacó a la luz una historia conmovedora que destrozó a todos. Un hombre de 55 años acababa de perder a su mujer y a su hija de 19 años a causa del coronavirus. Primero fue su esposa, y a las tres horas, su hija. "Viene porque el seguro le pide no sé qué papel y el no entiende. Y nosotros tampoco entendemos como consolarle. Se nos ha caído el alma a todos. Y así pasan estos días de mierda que nos ha tocado vivir", ha expresado el doctor en un tuit.
Armas asegura que las historias le llegan al alma, tantas familias destrozadas y tanta gente pasandolo mal le duele.
"Me impactó muchísimo un hombre relativamente joven que llegó desde un municipio lejano porque leyó que nuestro hospital aceptaba aún pacientes. Llevaba más de 10 días con síntomas, vivía solo desde hacía más de 20 años que dejó de hablar con su hija. Apenas podía caminar y el color de su piel era violáceo, porque llegó con el oxígeno en números rojos. A las cuatro horas ya estaba sedado y conectado a un ventilador mecánico, y sin nadie que preguntara por él. Pasaron muchos días, de vez en cuando me acercaba a la Unidad de Cuidados Intensivos para saber cómo iba. Al cabo de muchos días dejó de respirar y terminó perdiéndose a sí mismo, que al final era lo único que tenía", contaba en una entrevista en la cadena radiofónica.
Los contagios se han incrementado en las últimas semanas en este hospital de Elche donde la presión, según cuenta el médico, se hace "insoportable". Con fuerza seguirá al pie del cañón y lanzando mensajes para calar en la ciudadanía. "Lo excepcionalmente duro de una historia triste en esta epidemia sirve para humanizar los números tan fríos que se dan día a día. Detrás de esos números hay personas, familias y muchísimo dolor. Cuidémonos todos, pero hagámoslo bien, por ellos, por nosotros y por los que vendrán", ha sido uno de los últimos.
Hombre de 55 años, acaba de fallecer su mujer y su hija de 19 años por COVID.
— Julio Armas Castro (@julymed08) January 17, 2021
Viene porque el seguro le pide no sé qué papel y el no entiende.
Y nosotros tampoco entendemos como consolarle.
Se nos ha caído el alma a todos.
Y así pasan estos días de mierda que nos ha tocado vivir.
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