El último informe de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, perteneciente a la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, ha revelado que la densidad de mosquitos hembra potencialmente transmisoras del virus del Nilo occidental es baja en Andalucía. En particular, la especie Culex perexiguus presenta una baja densidad poblacional.
Sin embargo, se ha registrado un dato destacado en la estación de trampeo de Málaga, ubicada en la zona de la desembocadura del Guadalhorce, donde las capturas de mosquitos de la especie Culex pipiens han sido elevadas la semana pasada (Grado IV).
Ante este hallazgo, se ha informado a la Administración local para que adopte las medidas adecuadas de vigilancia y control. Por otro lado, los análisis realizados hasta el 12 de julio, teniendo en cuenta las fechas de captura desde el 23 hasta el 30 de junio en las provincias de Cádiz, Córdoba, Málaga y Sevilla, y desde el 1 al 23 de junio en la provincia de Huelva, han demostrado la ausencia del virus en los mosquitos.
La vigilancia entomológica, que consiste en la observación de los mosquitos, es una herramienta fundamental para detectar tempranamente la circulación del virus del Nilo occidental en Andalucía. Esto permite tomar las medidas adecuadas de vigilancia y control para reducir el riesgo para la población.
El seguimiento regular de las poblaciones de mosquitos mediante trampas estratégicamente ubicadas permite identificar las diferentes especies de mosquitos, evaluar su densidad poblacional y detectar la presencia del virus en las especies transmisoras, como Culex perexiguus, Culex pipiens, Culex modestus y Culex laticinctus.
Las trampas se localizan en 27 municipios de Andalucía, ya sea en áreas de alto o moderado riesgo o para obtener información sobre la progresión del vector en zonas de menor riesgo. El objetivo principal es detectar de manera temprana el aumento de la densidad de mosquitos transmisores y la circulación del virus, para que la administración local pueda intensificar las acciones de vigilancia, control y comunicación en su territorio, reduciendo así las probabilidades de transmisión a los humanos.
Además de estas actividades de vigilancia entomológica, en Andalucía se llevan a cabo otras acciones para controlar los mosquitos transmisores del virus del Nilo occidental. Se destaca la labor realizada por la Estación Biológica de Doñana (CSIC) con siete estaciones de trampeo en la provincia de Sevilla, así como la implementación del Proyecto Arboprevent, que incluye 800 puntos de muestreo en las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz, a realizarse durante este año y el próximo.
En la provincia de Huelva, el Servicio de Control de Mosquitos de la Diputación cuenta con 23 estaciones de trampeo. Toda esta información se coordina e integra con otras vigilancias realizadas en caballos y aves por las autoridades autonómicas de sanidad animal y fauna silvestre, así como con la vigilancia epidemiológica humana, siendo seguidas todas ellas por la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica.
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