A Charo le hicieron un cribado de cáncer de mama en septiembre de 2024. Se suponía que la llamaban en una semana, o como mucho en 15 días, si algo iba mal. Pero como se notaba un bulto en el pecho, no se quedó tranquila una vez pasado ese plazo.
"Cuando fui al mes a mi médico de cabecera me dijo que no sabía nada, solo que tenían que ampliar el estudio con una ecografía, pero no me llamaban", relata Charo a lavozdelsur.es. Ella es una de las 2.000 mujeres andaluzas —que se sepa, de momento— afectada por los errores en la detección de cáncer de mama por parte del Servicio Andaluz de Salud (SAS).
Pasaban los días y también la incertidumbre de Charo, a la que finales de octubre, tras reclamar el resultado, le dijeron que en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla, donde se lo hicieron, había una lista de espera de entre seis y ocho meses. "Y que tenía suerte, porque en el Virgen del Rocío tardaban un año...", recuerda en conversación con este medio.

"Le pregunté a quien me atendió por teléfono, cuando lo reclamé: ¿Tengo que esperar con un bulto en el pecho o me voy a la privada? Ya sabía la respuesta, claro que fui", confiesa Charo, que acudió a una clínica privada, donde le confirmaron sus sospechas. Ahí fue donde le diagnosticaron cáncer de mama en estadio II.
"La radióloga, en cuanto me vio, me dijo que tenía que hacerme una biopsia y que no lo dejara", rememora. Y se queja: "Si no me lo noto y espero, todavía estaría esperando resultados".
Hace dos meses que Charo terminó el proceso, que inició en diciembre de 2024, tras sus quejas. Desde entonces, le hicieron distintas pruebas, le diagnosticaron el cáncer, y empezó las sesiones de quimioterapia, al terminar la operaron y este verano se sometió a sesiones de radioterapia.
"Espero que cumplan lo pactado y puedan solucionarlo"
No puede evitar pensar qué hubiera pasado si no se nota el bulto en el pecho. "Puede que todavía no hubiera empezado el proceso y que hubiera ido a más, no se sabe. Ese es el peligro. Gracias a que lo notaba pude estar alerta", dice.
Charo es una de las mujeres que han acompañado a Ángela Claverol, presidenta de la Asociación de Mujeres Mastectomizadas (Amama) de Sevilla, a la reunión con la consejera de Salud, Rocío Hernández, y la gerente del SAS.
"Estoy esperanzada. Espero que cumplan lo pactado y puedan solucionarlo. Dentro de un mes, ya hablaremos", insiste Charo, que se refiere a las promesas realizadas por la Junta: la revisión de las mamografías, la depuración de responsabilidades y ofrecer información sobre el proceso que ha llevado a estos errores.
"Tenemos que luchar por las que van a volver, por las que vienen, que tienen que contar con nuestra ayuda", remata Charo, que como insisten desde Amama, "quiere conocer quién tomó la decisión" de no informar a las mujeres cuyas mamografías dudosas implicaron la petición de una segunda prueba complementaria.
"Hay gente que puede haber muerto y nos dicen que somos alarmistas"
"Hay gente que puede haber muerto y nos dicen que somos alarmistas", se queja Ángela Claverol, presidenta de Amama, en declaraciones a lavozdelsur.es. De momento, es partidaria de darle margen a la Junta para que cumpla sus compromisos. Han quedado en volver a reunirse dentro de un mes.
"Quiero estar esperanzada en que se va a arreglar", sostiene la presidenta de Amama, quien cuenta que "la consejera ha pedido disculpas a las mujeres que venían conmigo, y le he dicho que lo haga en los medios. Ha reconocido el error ella y la gerente del SAS. Ha habido un problema grave de información. Queremos que investiguen al responsable".
El abogado de la asociación, Manuel Jiménez Soto, asegura que tendrán que reunirse de nuevo con la Junta para saber si se está cumpliendo lo prometido, y decidir las próximas acciones de la entidad. Se plantean, incluso, interponer una posible demanda colectiva, dice en declaraciones a EFE.
"Ha sido muy desagradable, las mujeres que nos acompañaron, afectadas por estos errores, han llorado mucho porque estaban indignadas", relata Claverol, que sale de la cita con la consejera "esperanzada", pero "no contenta"
Salud dice que las 2.000 afectadas serán llamadas "una por una"
La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía asegura que las 2.000 mujeres con pruebas no concluyentes del cribado de cáncer de mama serán llamadas "una por una". "Se trata de pacientes con lesiones dudosas que, en principio, no revisten gravedad pero que deben hacerse un seguimiento fuera del cribado siempre bajo criterio médico", explican desde este departamento.
Actualmente, cuando se realiza una mamografía a una mujer dentro del programa de cribado del cáncer de mama existen tres posibles diagnósticos: negativo, positivo y lesión posiblemente benigna. En el caso de diagnósticos negativos, las pacientes son informadas del resultado; en el caso de diagnósticos positivos, las mujeres son igualmente informadas y derivadas para nuevos procedimientos pero, en los casos en los que se detectan lesiones posiblemente benignas, las mujeres pueden no haber sido informadas de que su caso sigue un procedimiento clínico con supervisión médica.
La consejera Rocío Hernández explica que, en estos casos, hasta tres radiólogos analizan las imágenes y, en función de los factores de riesgo de cada paciente, deciden el tiempo que ha de transcurrir para la segunda prueba. Las pacientes, que viven ajenas a estas circunstancias, reciben al cabo de meses o de un año una llamada que no esperan para esa segunda cita y sienten "alarma, intranquilidad y angustia".
"Es algo normal y creemos que hay que corregirlo, porque se puede corregir", ha señalado la consejera. El 98% de estos casos que necesitan una segunda prueba diagnóstica terminan siendo diagnosticados como benignos. Rocío Hernández ha incidido en el mensaje de tranquilidad y ha defendido que "en Andalucía tenemos un programa de cribado de mama sólido y protocolizado, que funciona bien".
Los puntos críticos que están confirmados por el momento por la Consejería de Salud son el Hospital Virgen del Rocío en Sevilla y "varios centros de salud". En cuanto al circuito preferente para las pacientes afectadas por los retrasos, Amama ha señalado que "tendría que estar ya operativo".
Feroces críticas de la oposición
La portavoz de Salud del PSOE en el Parlamento andaluz, María Ángeles Prieto, vincula los fallos en los cribados de cáncer de mama con los "brutales" recortes de la Junta en sanidad pública, y pide al Gobierno andaluz que aclare cuántas afectadas hay por provincia para dar tranquilidad a miles de mujeres.
"La consejera de Salud no sabe qué ha pasado ni cuántos casos hay, tampoco sabe qué ha fallado, algo intolerable. Son las propias mujeres las que están informando a la Consejería cuál ha sido el problema", lamenta Prieto, que pide el cese de la consejera de Salud, ya que a su entender "alguien que no es capaz de gestionar un programa como el screening de cáncer de mama, que salva tantas vidas, no puede seguir ni un minuto más al frente de esta responsabilidad".
La portavoz del grupo parlamentario Por Andalucía, Inma Nieto, ha instado al Gobierno andaluz a "asumir la responsabilidad" por la "crisis de las mamografías" que "tiene en vilo en este momento a miles de mujeres en Andalucía", ya que "con una disculpa no se tapa".
"Crece la indignación y la preocupación con toda razón en Andalucía, y sobre todo en las mujeres que se han sometido a las pruebas del cribado precoz del cáncer de mama y que no han recibido respuesta, y que ahora no saben si tienen cáncer o no lo tienen", señala Nieto, para la que "hacen falta explicaciones, hace falta transparencia y, sobre todo, hace falta asumir la responsabilidad".








