El Sindicato de Enfermería Satse ha pedido este jueves a la Junta de Andalucía la depuración de responsabilidades por lo que considera una negligencia en la gestión del programa de cribado de cáncer de mama en la comunidad. La organización sindical advirtió de que la situación no puede ser tratada como un simple error administrativo, ya que afecta directamente a la salud de miles de mujeres.
La denuncia surge tras conocerse los retrasos en la comunicación de resultados de las pruebas de diagnóstico precoz, que en algunos casos se habrían prolongado hasta dos años. Asociaciones y víctimas han alertado en los últimos días de las consecuencias que estos fallos pueden tener en la detección temprana de la enfermedad.
Satse señala que no se trata de casos aislados, sino de una falla estructural en el sistema de prevención. Según su valoración, esta deficiencia compromete la eficacia de un programa clave en la lucha contra el cáncer de mama y pone en riesgo la vida de miles de mujeres andaluzas.
El propio Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha reconocido que al menos 2.000 mujeres no han sido informadas de sus resultados dentro del programa. Para el sindicato, este dato confirma la gravedad del problema y refuerza la necesidad de depurar responsabilidades en la gestión sanitaria.
Disculpas insuficientes
La organización ha lamentado que episodios como este minan la confianza de la ciudadanía en el sistema sanitario público. También considera insuficientes las disculpas ofrecidas por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y por la consejera de Salud y Consumo, Rocío Hernández, tras conocerse la situación.
Satse recuerda que el presidente andaluz exigió recientemente responsabilidades políticas al Gobierno central en relación con las pulseras antimaltrato, por lo que instó a Moreno a aplicar el mismo criterio a la gestión de su Ejecutivo en materia sanitaria.
El sindicato ha criticado, además, que la Junta haya incumplido acuerdos previos alcanzados con responsables del área de salud, recortado recursos destinados a la sanidad pública y precarizado las condiciones laborales del personal, lo que, a su juicio, agrava la crisis en el sistema de prevención y atención a las mujeres.
