El Gobierno aprobará el próximo martes, en Consejo de Ministros, un plan de choque para apoyar a hosteleros y comerciantes que contempla la reducción a la mitad del pago del alquiler del local, como adelanta este sábado El País. Para poder acogerse a esta medida, es necesario que el inmueble pertenezca a un gran propietario y que no exista un acuerdo previo entre empresario y arrendador para la rebaja de la cuota mensual.
Los inquilinos podrán solicitar esta ayuda antes del 31 de enero una quita del 50% del alquiler durante un periodo que comprenda el actual estado de alarma —vigente, de momento, hasta mayo—, sus prórrogas y hasta cuatro meses posteriores, según ha informado el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo en el citado rotativo.
Los comerciantes y hosteleros también pueden pedir una moratoria del pago del alquiler, para lo que deberán acordar una devolución prorrateada con el propietario una vez pase el periodo que engloba la moratoria, cuatro meses después de la finalización del estado de alarma. El Gobierno obligará así a los grandes propietarios de locales alquilados a comerciantes y hosteleros a acordar una rebaja de las cuotas.
El Ejecutivo entiende por gran propietario a aquel que tiene más diez inmuebles urbanos, sin contar trasteros y garajes. Para los pequeños propietarios que alquilen su local a hosteleros y comerciantes, y en su mayoría, viven del cobro de ese alquiler, el plan no contempla esta quita del 50%, sino beneficios fiscales.
La medida busca ayudar a dos sectores muy tocados por la pandemia. La hostelería cerrará 2020 con una caída de su facturación del 50%, es decir, 67.000 millones de euros menos, a lo que se sumará el cierre de casi un tercio de los locales (entre 85.000 y 100.000) y la destrucción de una cuarta parte del empleo (unos 400.000 puestos de trabajo).
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