El Pleno del Parlamento de Andalucía ha rechazado este pasado miércoles, gracias a los votos de PP, Cs y Vox, la tramitación de la iniciativa legislativa popular por una Ley de Cultura en Andalucía. Un marco normativo que nace a propuesta de la asociación de gestores culturales andaluces GECA con el que se busca dar estabilidad jurídica, promover la profesionalización, garantizar la accesibilidad y la igualdad de oportunidades y fomentar una adecuada dotación presupuestaria de las administraciones públicas para la cultura.
La defensa de la iniciativa en sede parlamentaria ha corrido a cargo del alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz (PSOE), máximo responsable de uno de los once ayuntamientos que han refrendado en pleno esta ILP. Muñoz, además de encontrarse con el rechazo de la mayoría de la Cámara a la misma, ha tenido que defenderla no solo con el plantón de la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, sino con la ausencia en bloque de los miembros del Gobierno andaluz de PP y Cs. Un gesto que se ha interpretado como un desprecio a la cultura, a las iniciativas popular, a los ayuntamientos, o, yendo más allá, como símbolo de que la legislatura ha bajado oficialmente el telón.
Así lo han entendido en redes socialistas como Miguel Ángel Vázquez, ex consejero de Cultura de la Junta, quien ha considerado, tras hacer el vacío el Gobierno andaluz a esta propuesta, que “está claro que Moreno Bonilla ha dado por acabada la legislatura. Se debate una iniciativa popular para una ley andaluza de Cultura y no hay ningún miembro del Gobierno andaluz en el Pleno. Ni siquiera la titular de Cultura. Una falta de respeto al sector y a toda la ciudadanía”.
Pese a las justificaciones que PP, Cs y Vox han dado para el rechazo, escudándose por ejemplo en que parte de solo un puñado de ayuntamientos, la realidad es que el proyecto de ley nació en noviembre de 2020, en plena pandemia, durante el congreso andaluz de la cultura y la gestión cultural organizado por la GECA con la colaboración del Ayuntamiento de Sevilla y de la Consejería de Cultura. El sector acordó allí promover una ley propia de la cultura en Andalucía cuya redacción fue realizada por una amplia representación de asociaciones y entidades con el asesoramiento de expertos de primer nivel. El modelo ha sido la ley de cultura de Navarra, única comunidad autónoma que ha desarrollado este marco legislativo.
En cambio, el tripartito andaluz ha tirado por la borda todo este trabajo y considera este nuevo marco innecesario, asegurando en el caso de la ultraderecha que “es una tomadura de pelo”. La presidenta del Grupo Popular, Loles López, ha defendido que su partido "cree en la cultura", como, según ha sostenido, se demuestra en el incremento en más de un 29% del presupuesto destinado a ella entre 2018 —último año de gestión socialista en la Junta— y 2021, al tiempo que ha apuntado que Andalucía cuenta con “las herramientas jurídicas y operativas suficientes para garantizar el derecho a la cultura”.
Una propuesta municipalista que parte del sector de la Cultura
Sin embargo, como ha defendido el regidor socialista de Sevilla, cuyo grupo sí ha tenido respaldo del grupo de Unidas Podemos por Andalucía, “el sector profesional ha elegido a los ayuntamientos para que esta propuesta, que viene a reforzar la cultura como seña de identidad de nuestra tierra y a poner a Andalucía a la vanguardia del Estado español, llegue al Parlamento Andalucía”. “No querían que fuera una propuesta de un grupo político, sino que viniera reforzada por el poder del municipalismo y de los gobiernos locales, esos a los que los ciudadanos acuden en primera instancia, a los que le piden respuestas en los momentos urgentes y en el día a día”.
En este sentido, ha recordado que Sevilla decidió aceptar la propuesta y liderar una alianza de ciudades para respaldar esta iniciativa legislativa popular. “Tal y como establece la normativa, diez plenos de otros tantos ayuntamientos con una representación muy superior a los 40.000 electores hemos aprobado la adhesión a este proyecto”, ha añadido Muñoz. Concretamente, se ha aprobado esta iniciativa legislativa en los plenos de diez municpios andaluces: Sevilla, Andújar, Arjona, Ayamonte, Carboneras, Conil, Cortegana, Genalguacil, Dalías, Montilla y Peligros, poblaciones que representamos a casi 640.000 electores.
En esta línea, Antonio Muñoz ha advertido de que, "si no protegemos a la cultura, nos estaremos desprotegiendo todos", y ha defendido que la ley que plantea la iniciativa "no colisiona con otras normativas" de la comunidad autónoma, sino que las "complementa", y "no choca con instrumentos" de la administración regional "para el ejercicio del derecho de acceso a la cultura, ni es inviable económicamente ni tiene por qué conllevar un incremento de gasto" para la Junta.
En representación del grupo Unidas Podemos por Andalucía, su portavoz adjunta, Ana Naranjo, ha expresado el apoyo de su coalición a una iniciativa que ha considerado "necesaria" y "transversal", en la que "puede sentirse representada la ciudadanía de prácticamente todo el espectro político", y de la que ha valorado que se haya canalizado a través de una serie de ayuntamientos andaluces.
Por su parte, Loles López (PP) ha emplazado al alcalde de Sevilla a que pida al Gobierno central una Ley del Mecenazgo, así como el Estatuto del Artista, que "lleva tres años de retraso" y que otorga "dignidad a los profesionales", y ha concluido defendiendo la gestión del Gobierno de Moreno en relación a proyectos culturales. En concreto, se ha referido a la ciudad de Sevilla, donde se ha desbloqueado recientemente la rehabilitación de las Reales Atarazanas, y "no ha hecho falta esta ley", sino "ganas de gestionar y de creer en la cultura". Un ejemplo totalmente ajeno al debate en cuestión y una prueba de que es más que probable que ni se hayan molestado en profundizar en el proyecto de ley que ha diseñado el propio sector cultural andaluz.
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