El pasado viernes, más de 540 profesionales de la RTVA de todas las categorías, desde redactores hasta técnicos o administración, unieron sus firmas con nombre, apellidos y DNI públicos, para pedir en diez puntos una renovación completa en Canal Sur, que implique, por un lado, detener el proceso de deterioro a raíz de un nuevo recorte pactado por PP y Cs con Vox, y por otro, crear mecanismos para detener la manipulación sistemática. Ésta se está produciendo, aducen los trabajadores, a raíz de la llegada de Álvaro Zancajo a la dirección de informativos, a unos niveles "sin precedentes", pero recuerdan también problemas anteriores por injerencias con gobiernos socialistas que también quieren evitar, para centrarse "en hacer periodismo".
En el puente, fuentes de la plantilla indican que han sumado alrededor de una veintena más de firmas, dentro de los cuales destacan que los periodistas de informativos son más de la mitad, pero es que en el total de los trabajadores, ya son más de la mitad si no se cuentan los cargos de dirección, que se encuentran en gran parte en Sevilla pero que son una decena también en cada una de las provincias. La otra rama de la RTVA, la delegación en Madrid, firmó al completo salvo la periodista puesta a dedo por la dirección para dirigirla, Carmen Torres, ex de El Mundo.
Las firmas se entregaron a la dirección general del ente público, que recae sobre el periodista Juande Mellado y en quien la plantilla aún espera una reacción para acabar con una línea de informativos partidista "que son una y otra vez poner declaraciones de los consejeros y criticar al Gobierno Central en Madrid de forma sistemática, o alabar la gestión de gobiernos del PP en otras comunidades", lamentan otros trabajadores de informativos.
Además, estas firmas fueron registradas para que llegaran al consejo profesional, al consejo de RTVA (el órgano más directamente político) y al comité intercentros, representante de la plantilla. De esta forma, ya hay voces que sitúan la salida de Zancajo como próxima, aunque aún no hay gestos que lo muestren. Tras este importante "e histórico" movimiento de la plantilla, según los organizadores de la recogida de firmas, y teniendo en cuenta que no ha sido promovida por ningún sindicato sino directamente por trabajadores no movilizados hasta ahora, toca el turno de que sea Mellado o el Gobierno de la propia Junta quienes hagan el siguiente movimiento.
Todo ello, con una huelga prevista para los días previos a Nochebuena, de la cual aún no hay certezas sobre cómo será. Ya en febrero, Canal Sur se fue a negro en el horario de informativos durante dos días con reclamaciones similares por parte de los trabajadores que se atenuaron por la llegada de la pandemia. Desde entonces, la situación no ha hecho más que empeorar, pues los periodistas, aunque también el resto de empleados de RTVA, alertan de continuas intromisiones en las formas de abordar noticias para que sean favorables a PP y Cs. "Es un propaganda, propaganda barata", indicaban fuentes de la plantilla a este periódico.
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