Andalucía concentra el 17% de las grandes superficies en España, tanto como la comunidad de Madrid según la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), la organización más representativa de la distribución comercial en el país, con 20 firmas asociadas, una red de 7.200 tiendas y 234.857 empleados en todas las comunidades autónomas.
La superficie comercial de Anged se mantuvo en los 8,8 millones de metros cuadrados (-0,7 %), por la adaptación permanente a los nuevos hábitos de compra y realidad del mercado según los datos aportados en su asamblea anual, que tuvo lugar este jueves en Madrid.
Precisamente Madrid retoma el liderazgo en superficie comercial, con más de un millón y medio de metros cuadrados, seguida de Andalucía y Cataluña. Por su parte, País Vasco, Castilla y León, Baleares y Navarra son las comunidades que más crecieron en términos relativos.
La Comunidad de Madrid concentra el mayor número de empleados, con 60.149 (26 %), gracias también a la presencia de una buena parte de los servicios centrales. Le siguen en importancia Andalucía con 34.780 empleos, el (14,2%), Cataluña (13 %) y Comunidad Valenciana (9 %).
Las empresas de Anged alcanzaron en 2021 cerca de 7.200 tiendas en España, tanto propias como de sociedades participadas. El informe anual de la Anged es la mejor fotografía económica del sector de la distribución en España y revela la profunda transformación que este sector ha experimentado por la pandemia.
Con 8,8 millones de metros cuadrados, su red comercial está presente en todo el territorio y conforma la más amplia oferta de productos, marcas, canales y formatos: desde alimentación, textil, bricolaje, electrónica y electrodomésticos a hogar, juguetes, deportes, libros, productos culturales y reparación de automóviles.
El presidente de Anged, Alfonso Merry del Val, cree que hay que “cerrar las heridas de la pandemia y restablecer la confianza en el futuro de nuestra economía. Nuestras empresas han hecho todo lo posible para cumplir estas dos premisas a lo largo de un 2021 repleto de altibajos”.
En su discurso ante la asamblea Merry del Val advirtió que “la inflación es el peor enemigo de la sociedad, también de la distribución, porque depreda los márgenes empresariales y recorta la renta y el consumo de los hogares. Frente a relatos conspiratorios y el populismo, conviene ser muy claros en este asunto: Nadie saca rédito con la inflación. Destruye riqueza y perjudica gravemente la competitividad de las empresas”.
“La tentación populista de convertir al empresario en un chivo expiatorio de los males de la economía o en un comodín del que seguir extrayendo recursos es una apuesta de alto riesgo. Vamos por un camino muy peligroso si convertimos España en un país hostil para la inversión y el emprendimiento. Nos puede llevar a un estancamiento secular del PIB, con un reparto menguante de la riqueza” advirtió el presidente de Anged.
Un moderado incremento salarial
Anged y los sindicatos Fetico, Fasga, CCOO y UGT sellaron en 2021 un acuerdo sobre el convenio colectivo, por una duración de dos años, que constituye una herramienta imprescindible de transición para afrontar los dos grandes retos del sector: el durísimo impacto de la pandemia en la actividad y el acelerado proceso de transformación digital.
La pandemia ha tenido un impacto crítico en la facturación y actividad de las empresas, en un entorno de restricciones y cierres temporales de tiendas, que ha obligado a transformar por completo la operativa de las empresas y a responder a un incremento histórico del e-commerce.
En este contexto de dificultades, Anged y los sindicatos acordaron un incremento salarial del 2 % en dos años “que certifica el reconocimiento al compromiso demostrado por los empleados durante la pandemia” dicen en la asociación.
Según estimaciones de CEOE, el coste regulatorio para el comercio con el covid ya creció en 1.774 millones de euros, como consecuencia de la hiperregulación creada por más de 3.000 nuevas normas europeas, nacionales, autonómicas y municipales.
“Esta tendencia no ha cesado en el último año. Nuestras empresas se han visto afectadas por una treintena de medidas que encarecen sus costes por distintas vías: más impuestos y cotizaciones, nuevas obligaciones para el ejercicio de su actividad, importantes requerimientos de inversión para adaptar su negocio a la nueva regulación y altos costes de transacción ocasionados por la complejidad y fragmentación de las normas” denuncia Merry del Val.
Contrataciones indefinidas
El 81,6 % de los empleados de las empresas de Anged tiene contrato indefinido (191.730 trabajadores), frente al 18,4 % de contratos temporales (43.127 trabajadores). La contratación laboral de duración indefinida supera en 7 puntos a la del conjunto de la economía española y ha crecido en 2021 un 3,3 %. Los contratos a tiempo completo representan el 53 % del total.
Un síntoma de la estabilidad laboral es la permanencia en el puesto de trabajo: el 69,1 % de los empleados lleva más de 4 años trabajando en su empresa, 15 puntos más que la media nacional. Por último, es un sector con una mayor representación femenina: el 65,6 % de la plantilla de Anged son mujeres, cinco puntos más que la media del comercio minorista, hasta sumar más de 154.168 mujeres.
"La superficie comercial se ha reducido en España drásticamente en 3,5 millones de metros cuadrados en 2020 (60 % de la superficie perdida desde el 2008 según datos del INE). Para 2021 estimamos la superficie total minorista de 68,5 millones de m2 (incluyendo establecimientos de venta de combustible). Con 8,8 millones de m2 , la superficie comercial de ANGED representa el 12,8 % del total. La flexibilidad introducida por el convenio de grandes superficies, junto con el recurso a los ERTE han permitido adaptar la actividad a un entorno de restricciones".
La pandemia y la transformación digital
La pandemia supuso para muchos consumidores su estreno en las compras online. Según datos del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (Ontsi), para el 47,2 % de los que compraron online durante el confinamiento era su primera vez y la mitad de ellos confía en seguir haciéndolo en el futuro. Esto se ha traducido en varios fenómenos.
Por ejemplo, Internet sigue siendo el canal de búsqueda de información (96 %) y la frecuencia de las compras sube a 3,8 veces al mes en 2021, frente a 3 veces en 2019 (IAB). De esta forma, el peso de las ventas del e-commerce sobre el total de la facturación del comercio minorista (excepto vehículos y empresas de menos de 10 empleados) alcanzó el 14 % en 2021, superando a Francia e Italia y aproximándose a mercados más maduros como Alemania y Reino Unido,
En los últimos 10 años, el e-commerce ha crecido de media anual cerca del 20 %, frente a tasas inferiores al 1 % en el total del comercio. El 70 % de españoles ya compra por Internet, frente al 8 % de 2004.
España ha duplicado desde 2019 la facturación online de las empresas españolas alcanzando el 14 %, por debajo de la media europea (16 %) pero superando a Francia e Italia, aunque por debajo por ejemplo de los Países Bajos que superan el 35 %.
El comercio electrónico se dispara
El comercio electrónico de productos y servicios en España ingresó 57.747 millones de euros en 2021, un 11,7 % más que el año anterior, según el Informe de Comercio Electrónico de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), que recoge los pagos online con tarjeta (85 % del total en 2020, ONTSI). La transformación digital absorbe un tercio de la inversión.
Excluyendo servicios, las ventas online de productos alcanzan los 16.867 millones de euros, un 6 % más que el año anterior, y más del 62 % de los niveles prepandemia, especialmente por el avance de los formatos de dominio alimentario y la textil moda.
En esta década, el peso del e-commerce en el comercio se ha multiplicado por diez. La contribución comparable es del 7,2 % (contando solo la venta de bienes a consumidores en España), aunque rozó el 10 % durante el periodo de confinamiento y cierre de las tiendas físicas de no alimentación.
Hay un detalle importante y es que más de la mitad de las compras online que realizan los españoles son a empresas en otros países, es decir, se importan. Un porcentaje que supera el 55 % en 2021, y que en prendas de vestir llega al 86 % y en ordenadores al 71 %.
La pandemia ha creado el entorno propicio para derribar algunas barreras a las compras online de gran consumo. En 2021 han seguido aumentando los compradores online: cuatro de cada diez españoles hicieron al menos una compra de alimentación online, diez puntos más que en 2020 y veinte más que en 2019 (Nielsen). A pesar de los nuevos hábitos de compra, la cuota de mercado sigue siendo modesta, del 2,9 %, lejos de mercados más consolidados como el de Francia y Reino Unido, con cuotas del 11-14 % (Kantar)
Anged aporta un 11% más en impuestos
La aportación retributiva y el pago de impuestos de las empresas de Anged creció un 11 % hasta los 10.787 millones de euros. En perspectiva, en los últimos ocho años las empresas de Anged han aportado más de 76.057 millones de euros.
El importe de sueldos y salarios directos más las cuotas a cargo de las empresas pagadas a la Seguridad Social suman una aportación retributiva total superior a los 6.750 millones de euros. Mientras que la suma de los tributos directos e indirectos pagados en concepto de Impuesto de Sociedades, las tasas locales, los tributos autonómicos, IVA, la seguridad social e IRPF de los empleados supone una contribución tributaria cercana a los 4.030 millones.
La pandemia truncó seis años seguidos de recuperación del consumo, pero volvió a retomar la senda positiva en 2021. La facturación de las empresas de Anged creció un 9,7 %, hasta los 40.049 millones de euros. Tras un inicio de año con restricciones al comercio de no alimentación, el sector se recuperó en la mitad del año a medida que avanzó la vacunación, pese al parón turístico.
El crecimiento de la facturación de Anged es un punto superior a la media del comercio minorista, gracias a la flexibilidad mostrada para adaptar productos, procesos, formatos y canales de venta.
Los establecimientos de Anged alcanzaron una afluencia de clientes en torno a los 3,8 millones diarios (más del 20 % de los hogares españoles), a pesar de la importante ausencia de turistas, las restricciones a las tiendas, el teletrabajo y los cambios en el consumo por la pandemia.
La facturación online que se había duplicado en 2020, ha seguido ganando peso en la facturación de 2021 y el número de clientes que han comprado por Internet en el último año es el doble que antes de la pandemia (son ya tres veces más que hace cinco años)
La recuperación está siendo más lenta e incompleta en España que en el resto de los países europeos, a pesar de la capacidad de adaptación de los hogares y las empresas. los cuellos de botella en la logística global han frenado la demanda de bienes duraderos, como los coches y otros productos tecnológicos.
Finalmente, el repunte de los precios de la energía ha erosionado el poder de compra de los hogares, desde el segundo semestre de 2021, a lo que se añade las consecuencias de la guerra en Ucrania. La ausencia de turistas internacionales explica al menos el 18 % de la pérdida de ventas en 2020 y que en 2021 España todavía no recibió 52 millones de visitantes.
La alimentación siguió marcada por las sucesivas olas pandémicas, el fin de las restricciones en la restauración y el repunte de inflación a fin de año. Así, en 2021 el gasto dentro de los hogares se redujo un 6,6 % y en la restauración creció un 23,4 %. En conjunto, el gasto total en alimentación se redujo un 0,1 %, según datos de Kantar.
En este entorno, los supermercados grandes vuelven a ganar terreno frente a las tiendas independientes, que acentúan su caída. Los híper mantienen su cuota del 14,3 %, prácticamente igual al 2019, gracias a que muchos hogares encontraron en ellos espacios seguros donde realizar compras completas y reducir el número de visitas.
Un 8% más de consumo tecnológico
El mercado de bienes de consumo tecnológicos creció un 8 % en 2021 respecto a 2019 lo que ilustra el buen comportamiento del sector de productos tecnológicos durante la pandemia. No obstante, las cifras del último periodo de 2021 -con campañas claves como las de Black Friday y Navidad- estuvieron por debajo de lo esperado.
La coyuntura económica y sanitaria siguieron afectando mucho a la moda. Acotex cifra en 8.900 millones de euros la facturación del comercio textil en 2021, un 16 % menos que en 2020. Desde el año 2019 se ha perdido más de la mitad de facturación, cerca de 9.200 millones de euros, un 18 % del empleo y un 60 % del parque de tiendas.
Las cuotas de mercado se mantienen, salvo en cadenas independientes y los grandes almacenes, que se ven más afectados por la falta del turismo de compras (en torno al 10 % de la facturación pre-Covid). Con el confinamiento y restricciones de movilidad, el consumo de moda y la belleza pasó a un segundo plano para cerca de la mitad de compradores. La compra online se aceleró más que nunca, creció un 55 %, pero no compensó la caída offline, según Kantar.
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