El abogado Juan Luis Aguilera gestiona desde su despacho granadino ocho demandas contra la multinacional Amazon por impagos a proveedores españoles. Este jueves el juzgado de primera instancia número 16 de Madrid ha admitido a trámite la primera de las ocho, interpuesta por la empresa de informática Megasur, proveedora que reclama 410.392 euros. El resto de afectadas son Saturday Trade, compañía madrileña de productos de electrónica, e Infortisa, mayorista informática valenciana. El resto aún no se han manifestado públicamente.
Estas demandas empiezan a materializarse después de más de un año gestándonse y juntas superan los 3,5 millones de euros. Según ha explicado Aguilera en eldiario.es, Amazon deja de pagar distintos conceptos que se acumulan siendo complicado de demostrar. La multinacional estudiará la demanda en los próximos veinte días, aunque según publica el medio, "no están muy de acuerdo con lo que han leído en prensa sobre el asunto".
La demanda incluye 6.000 folios en pruebas para no dejar ningún cabo suelto. "Lo que impugnamos es la actitud que mantiene Amazon con sus proveedores cuando trabaja con ellos", ha dicho a eldiario.es. donde también expresa que todo comienza con "Megasur. Es la que pierde el miedo y dice: que decida un juez. Megasur es importante en su sector, pero si la comparas con Amazon no es nada, es un mosquito".
Para el abogado, "Amazon es muy complicado, la mayor parte del tiempo la hemos pasado intentando entenderlo. La trastienda es complejísima. Y al ser una empresa tan grande que lo domina todo hay muchos desequilibrios". El granadino se ha topado con prácticas que Megasur denuncia, en concreto explica. "Te encargan 300 ordenadores y dicen que les has enviado 210. No tienen firmados albaranes: te dicen que no estaban y lo descuentan directamente. ¿Dónde van los ordenadores? Megasur ha hecho vídeos subiendo la mercancía a los camiones. Decían: ¿qué hacemos? Si es que Amazon dice que no llegan, pero al transportista lo conocemos perfectamente y nos fiamos de él".
De momento, el resto de demandas aún no han sido admitidas a trámite y están en fase de presentación, por lo que los proveedores tendrán que esperar para lograr la batalla contra la multinacional.
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