La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) instó el pasado 10 de julio a España a adoptar medidas urgentes para la recuperación del acuífero detrítico de Almonte-Marismas, ubicado en el Parque Nacional de Doñana. Esta recomendación pone de relieve la delicada situación que atraviesa uno de los espacios naturales más emblemáticos de Andalucía.
La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha señalado en una entrevista que un solo año húmedo no es suficiente para recuperar los acuíferos de Doñana, cuyo deterioro responde principalmente al cambio climático y a la sobreexplotación de los recursos hídricos. Ambas administraciones, autonómica y central, reconocen estos problemas desde al menos 2020, aunque la sobreexplotación se viene advirtiendo desde hace más de dos décadas.
El impacto del cambio climático no solo afecta a la cantidad de precipitaciones, sino también a la modificación de los ecosistemas y los hábitos de las aves que habitan el parque. Según García, para lograr la recuperación de los acuíferos sería necesario que las condiciones excepcionales de lluvia se mantuvieran de forma regular, algo que las previsiones climáticas no anticipan debido a la tendencia hacia temporadas más calurosas y lluvias irregulares.
La consejera ha subrayado la importancia de una coordinación efectiva y una corresponsabilidad compartida entre la Junta de Andalucía y el Gobierno central para enfrentar los desafíos ambientales que afectan a Doñana. Ha remarcado que es necesario evitar la transferencia de responsabilidades entre administraciones y centrarse en la protección conjunta de este espacio natural declarado Patrimonio de la Humanidad.
Reuniones sobre los acuerdos
En este sentido, ha dicho que ambas administraciones mantienen reuniones periódicas para supervisar el Acuerdo de Doñana, un pacto que movilizó una inversión inicial de 1.400 millones de euros. La Junta se ha comprometido con 728 millones, pero ya ha incrementado esta cifra hasta 852 millones, con un avance del 58 % en la ejecución de los proyectos contemplados.
Entre las principales iniciativas destacadas, García ha mencionado inversiones superiores a los 400 millones de euros en obras hidráulicas, con más de la mitad ya ejecutadas. Además, puso en valor el papel del Gobierno central en la recuperación de los caños del Guadiamar y en garantizar el abastecimiento de agua superficial en Matalascañas. También ha resaltado la compra por parte de la Junta de las fincas Veta la Palma y Tierras Bajas, que contribuirán al control hidráulico del acuífero, especialmente en épocas de sequía, operación que ha contado con la aprobación de la Unesco.