La organización WWF ha valorado positivamente la convocatoria de subvenciones anunciada por el Gobierno, dotada con 28 millones de euros y que pueden empezar a solicitarse desde este 29 de agosto, para impulsar acciones de renaturalización y restauración ecológica en Doñana. Sin embargo, ha subrayado que estas ayudas solo tendrán sentido si se ejecutan con rapidez y se cumplen los plazos marcados.
“Es necesario poner en marcha todas las medidas posibles y que exista una verdadera lealtad entre las Administraciones, ya que no todo depende únicamente de las subvenciones”, señaló la organización en un comunicado.
WWF revisará la orden de subvenciones
En este sentido, el representante de WWF, Juanjo Carmona, confirmó que la entidad analizará con detalle tanto el borrador de la orden de subvenciones como la guía técnica que lo acompaña. Además, adelantó que, dentro del plazo establecido por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), presentarán sus aportaciones con el objetivo de contribuir a la mejora de las ayudas y fomentar una agricultura sostenible en Doñana.
El Miteco abrió este jueves la fase de información pública de la convocatoria, que gestionará la Fundación Biodiversidad, F.S.P., bajo un régimen de concurrencia competitiva. Las ayudas están dirigidas tanto a proyectos de renaturalización y restauración ecológica como a medidas específicas de apoyo a los agricultores del entorno del Parque Natural de Doñana de cara a 2025.
Reducir la presión sobre el acuífero, clave para Doñana
Carmona recordó que “reducir la presión del regadío sobre el espacio natural y el acuífero requiere la aplicación conjunta de múltiples medidas”. Entre ellas, destacó la renaturalización de fincas agrícolas, la restauración de zonas degradadas, el cierre de pozos ilegales, el fin de explotaciones no autorizadas y la sustitución del uso de aguas subterráneas por aguas superficiales en Matalascañas.
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— WWF (@WWF) September 17, 2016
“Si todas estas medidas se aplican junto a otras, como los planes de extracción o el Plan de la Fresa, y consiguen pasar del papel al terreno —como llevan décadas pendientes—, estaríamos ante la única solución real para garantizar la conservación del acuífero y la viabilidad de la agricultura”, insistió.
Estas iniciativas, añadió, no solo son imprescindibles para la salud de Doñana, sino también para cumplir los compromisos internacionales asumidos por España con la Unión Europea y la Unesco.
El representante de WWF recordó además que la organización publicó en 2023 un estudio sobre el estado del acuífero que reflejaba una sobreexplotación del 109%, incluso sin contar las extracciones ilegales. “Para garantizar una extracción sostenible, es fundamental que haya coordinación y lealtad entre Administraciones”, subrayó.
Por último, Carmona concluyó que “todos estos planes son absolutamente necesarios para Doñana, su agricultura y sus ecosistemas. Es vital que pasen cuanto antes del papel a la realidad, se apliquen y se cumplan los plazos, para sacar al acuífero de la situación de colapso en la que se encuentra y mejorar el estado de muchos ecosistemas que dependen de este entorno”.
