Será un año más de forma efímera, pero Aromas de Medina, la enseña asidonense de los dulces típicos de Navidad, vuelve a abrir en el centro de Jerez. Esta vez, a diferencia de campañas anteriores, el local elegido no será el de la calle Lancería, sino que la firma ha decidido mudarse unos metros más hacia la Plaza.
La tienda de las llamadas pop up abrirá en la esquina de Corredera con Esteve, en lo que fue el antiguo establecimiento de máquinas de coser de López Cepero, que ya anunció el cierre hace tiempo en dicho emplazamiento.
En lugar de material de costura, el local olerá a hojaldrinas de chocolate y a nueces de macadamia envueltas en cacao, dos de los productos de una firma que no solo produce y comercializa los míticos alfajores de Medina, amarguillos o los clásicos mantecados navideños.
La empresa con sede en Medina Sidonia cumple 65 años de historia y tradición en este 2023, por lo que serán unas Navidades de lo más especiales para una enseña familiar que vende unos 200.000 kilos de dulces navideños cada año.
“El alfajor es la barrita energética más antigua del mundo”, dice José Joaquín Barrios, director comercial de Aromas de Medina e hijo de Santiago Barrios y María del Carmen Macías, fundadores de la empresa, creada en 1958.
El tatarabuelo materno de José Joaquín fue panadero, más tarde su bisabuelo heredó la panadería, como lo haría también su abuelo, que la transformó en pastelería. Su madre, María del Carmen, continuó con la saga panadero-pastelera pero quiso darle una nueva dimensión al negocio, vendiendo fuera de Medina. De aquella idea, esta nueva tienda en el centro de Jerez que, como es ya un clásico cada Navidad, volverá a estar de lo más concurrida.
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