El 30 de junio de 18.00 a 19.00 horas se repartirán helados gratis desde el nuevo establecimiento que se ha instalado en la calle Higuereta 61, en Rota. La heladería Loco Polo llega por primera vez a la provincia de Cádiz para reinventar el mundo del polo y lo celebra con esta promoción que permitirá probar el producto estrella de esta firma nacida en San Sebastián.
Tras el éxito de su última reapertura en Zaragoza, ciudad en la que vendieron más de 15.000 helados en tan solo dos semanas, Loco Polo apuesta por esta expansión y se fija en Cádiz a las puertas de las vacaciones.
"Rota se caracteriza por su costa llena de playas de gran extensión y mucho calor. Es por ello que, con la llegada del verano, Loco Polo estará disponible para todos los costeros", comentan los fundadores de la compañía, Oier Almandoz e Iñigo Galdona.
Aparte del producto estrella, la marca ofrecerá diferentes tipos de cafés como Frappé y otros snacks salados como Focaccias, tostadas… y el resto de su extensa carta. Allí, contarán con dos profesionales que se suman a los más de sesenta empleados que conforman la plantilla en la actualidad.
Según explica la empresa, esta nueva apertura se enmarca en la ambiciosa estrategia de crecimiento y expansión de la compañía. En este sentido, la startup donostiarra ha anunciado su intención de contar con 350 Mini Corners en veinte provincias distintas de aquí a fin de año y la inminente entrada en Omán, lo que representará su primera incursión fuera de las fronteras de Europa. De esta forma, corrobora que este nuevo concepto enamora ambos sitios totalmente diferentes que aún así tienen algo en común, un producto irresistible.
Desde sus inicios, Loco Polo trabaja sobre la premisa de crear una nueva cultura alrededor del mundo del polo para seguir sorprendiendo con su cremosidad y rellenos. Así, la compañía apuesta por la calidad y diferenciación de sus productos y afianza su filosofía en el sector heladero y las diferentes ciudades en las que tiene presencia; como San Sebastián, Bilbao, Madrid, Zaragoza, Sevilla, Sitges y Lérida en España y Burdeos y Lille en Francia, por medio de sus tiendas en las que disfrutar de hasta 30 referencias de polos.
Estos "polos locos" se distinguen por sus sorprendentes rellenos, elaborados con mermeladas y cremas de sabores que crean deliciosos contrastes. Asimismo, toda la producción se lleva a cabo en su obrador de San Sebastián, por lo que todos los polos llevan el sello gastronómico donostiarra. El resultado de esta producción local es una textura ligera y cremosa elaborada con productos 100% naturales sin conservantes ni colorantes.