Operación Triunfo ha contado este sábado con la presencia de una psicóloga infantil y juvenil en la academia para abordar el tema del acoso, a raíz del caso de Sandra Peña. Esta intervención se ha centrado en ofrecer orientación y herramientas de apoyo a los participantes y a la audiencia sobre cómo actuar ante situaciones de acoso.
El programa se caracteriza por no soler proporcionar información sobre hechos externos, pero han hecho una excepción para comentar este caso concreto. La directora Noemí Galera ha aprovechado la ocasión para referirse al caso de Sandra Peña, la joven sevillana que se ha suicidado tirándose por el balcón y sensibilizar y concienciar a los espectadores que seguían el directo y a los propios concursantes.
El fallecimiento de Sandra
Este martes, una joven de 14 años llamada Sandra Peña se ha precipitado desde el balcón de su vivienda para acabar con su vida después de años recibiendo acoso escolar en el instituto en el que se encontraba. Dicho centro educativo no activó los protocolos antiacoso y ahora se enfrenta a denuncias de la familia, del Defensor del Pueblo Andaluz y de la propia Junta de Andalucía.
Varios centenares de familiares y vecinos se concentraron este viernes cerca de la vivienda de Sandra. La convocatoria, impulsada por familiares de menores escolarizados en el colegio Irlandesas Loreto, tuvo como objetivo rendir homenaje a la adolescente y denunciar presuntos casos de acoso escolar en el centro.
muy bien el programa trayendo a una psicóloga infantil y juvenil y noemí mencionando el caso de sandra peña para todas las personas que están viendo el directo👏🏼#OTDirecto18O pic.twitter.com/oXbhr8lWYC
— rs10 (@rafalozzz) October 18, 2025
Entre los asistentes se encontraban los padres, el hermano y el abuelo de la joven, así como numerosos vecinos y allegados. La madre, visiblemente emocionada, participó vestida con la camiseta del equipo de fútbol en el que jugaba su hija. Los participantes se reunieron alrededor de un altar con flores y velas instalado en memoria de la adolescente y reclamaron responsabilidades al colegio, señalando que los problemas que la institución atribuía a la familia de la menor no se correspondían con la realidad y que las medidas prometidas para su supervisión durante el recreo no se habían cumplido.