Vicentina es el proyecto de vida de José Manuel Rosa Romero (Sevilla, 1980) tras once años trabajando en Nostromo Comics, una conocida librería de la ciudad, especializada en cómics, juegos y merchandising. "La idea de Vicentina nace con ese mismo concepto, pero con un producto totalmente diferente, el café", explica Chema, quien se formó y especializó en cuestiones cafeteras durante la pandemia.
El proyecto también se gestó en pleno confinamiento. Un local vacío cercano a su casa y una situación de ERTE llevaron a Chema a abrir este espacio dedicado al café de especialidad, el 21 de noviembre de 2020. "Al principio empecé con un café de Sevilla llamado Ineffable, pero entré en contacto con otro tostador y comencé a crear mi propia marca de café, bajo el nombre de Vicentina", explica ilusionado. "El café me lo tuestan en Dos Hermanas con los perfiles de tueste y el origen que quiero, pero en un futuro cercano, espero poder tostar mi propio café", reconoce.
Dos años han pasado desde la apertura y su creador asegura estar cada vez con "más ganas, más planes, proyectos, que espero se materialicen pronto". En Vicentina la mayoría de productos que ofrecen son de proximidad, Sevilla o alrededores. "El pan con el que trabajo es de un obrador sevillano, el aceite de Valencina, el café lo tuesto en Dos Hermanas", remarca Chema, que prima además el trato directo con el cliente.
El café que se ofrece en Vicentina es de especialidad. "Este mi fuerte, además de la búsqueda por democratizar el producto, ya que este tipo de café siempre ha estado enfocado a un público más selecto y mi idea es hacer un café para todo el mundo, porque todos tenemos derecho a tomar un buen café", expresa. En este sentido, explica que "el café de especialidad siempre va a tener un precio más elevado que al que estamos acostumbrados en los bares o los supermercados, porque es un café que pretende que el agricultor tenga beneficio real sobre su producción para que pueda invertir en la mejora su plantación". Y, en definitiva, conseguir un mejor café.
Para Chema, un apasionado de este mundo, el café está infravalorado. "Es de los pocos productos que cotiza a la baja en bolsa con respecto a lo que se vende al público", advierte. Sin embargo, en Vicentina cuentan con una gran variedad de cafés de origen, entre los que destacan de Costa Rica, Guatemala, Honduras, Kenia, Congo, Perú, Indonesia y Myanmar (antigua Birmania). "Ahora hemos metido blend, que son mezclas de cafés de origen. Y el proceso con todos pasa primero por el tostador, que compra el café en verde y me lo tuesta a demanda", comenta.
"Es importante que haya una cadena de valor, de ahí a que haya que explicarles a los clientes por qué el café tiene estos precios, ya que pasa del agricultor en su finca, luego por quien te sirve el café, para que al final disfrutes de un producto fresco y que sean de cosechas cercanas", argumenta este barista, quien apunta que "el café industrial se puede llevar años en silos, pero con el café de especialidad eso no pasa, ya que va con la temporada".
Su nombre no es casual, ya que está estrechamente ligado al barrio donde se encuentra, San Vicente. "Queríamos integrar el espacio completamente a la zona ", cuenta su encargado. En cuanto al público, destacan las personas extranjeras, y tiene su explicación: "Están acostumbradas a tomar café de buena calidad en sus países y cuando vienen a España se encuentran un café terrible". No obstante, Chema asegura que cada vez se interesa gente más joven y de edades más avanzadas. "Al final, con la idea de democratizar el café, en Vicentina tenemos un poco de todo", comenta.
Además de café en grano, de origen recién tostado, para llevar (expresso, doble, americano, cortado), también cuentan con infusiones, pan, kombucha, cervezas artesanas, aceite, galletas, bizcochos, magdalenas, chocolate y productos relacionadas con el café en el desayuno o la merienda.
Este espacio dedicado al café de especialidad cuenta con una pequeña barra exterior para quien guste de disfrutar de su café en el lugar. También disponen de varias banquetas en su interior, aunque sobre todo están enfocados en el formato take a way. "Los vasos que tenemos son compostables y biodegradables, con la idea de proteger un poco el planeta, porque este tipo de cafeterías generan mucho residuo, e incluso en mi línea de café tengo unas cápsulas de nesspreso 100% compostables y biodegradables", espeta Chema.
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