San Alejo es considerado uno de los santos más populares de la Edad Media y es el patrono de los mendigos, peregrinos y enfermeros. Nacido en Roma en el siglo IV, fue hijo de una familia noble y acaudalada. Sin embargo, renunció a una vida de comodidades para entregarse por completo a Dios.
Según la tradición, el día de su boda, movido por una profunda vocación espiritual, abandonó a su esposa y su hogarpara vivir como un mendigo en Siria. Allí pasó 17 años en oración y penitencia, hasta que la fama de su santidad lo obligó a regresar a Roma en el anonimato.
Lo más impresionante de su historia es que vivió como un desconocido en casa de sus padres, bajo la escalera del palacio familiar, siendo objeto de desprecio y sin revelar su identidad. Solo tras su muerte, se descubrió quién era realmente gracias a una carta que llevaba consigo. Su vida es ejemplo de renuncia, humildad y obediencia absoluta a la voluntad divina.
Otros santos y beatos
Hermana de San Ambrosio de Milán, fue una mujer consagrada que vivió en el siglo IV. Dedicó su vida a la oración, la castidad y el servicio, influyendo profundamente en la formación espiritual de su hermano. Fue una de las primeras vírgenes consagradas reconocidas por la Iglesia.
Madre de San Basilio el Grande, San Gregorio de Nisa y Santa Macrina, vivió en el siglo IV. Educó a sus hijos en la fe cristiana en tiempos de persecución. Es venerada como un modelo de madre cristiana y transmisora de la fe.
Obispo de Tivoli, en Italia, probablemente en el siglo VI. Fue recordado por su celo pastoral y defensa de la ortodoxia frente a las herejías que azotaban a la Iglesia en su tiempo.
Presbítero y mártir del siglo IV, víctima de la persecución de Diocleciano. Su valentía en defender la fe hasta la muerte lo convirtió en símbolo de fidelidad al Evangelio.
Obispo greco-católico eslovaco del siglo XX. Murió mártir en 1960, encarcelado por el régimen comunista checoslovaco por defender la libertad religiosa y su fidelidad a Roma. Fue beatificado por San Juan Pablo II en el año 2001.
Catequista chino, mártir en 1900 durante la persecución de los bóxers. Se negó a renegar de su fe y fue ejecutado por su fidelidad a Cristo. Fue canonizado en el año 2000 como uno de los mártires de China.


