Mamen Sánchez, quiere ir a Madrid a hacer política, aunque sea política de “uñas y dientes”. Parece buena idea, pero lo mismo va tarde…
No entiendo —mejor dicho, no acabo de comprender— el tema de los presupuestos municipales. Al parecer, el Ministerio de Hacienda le ha pedido al Ayuntamiento de Jerez que reduzca 8,6 millones su partida de gasto —objetivamente, un palo— pero eso al parecer no significa que le haya echado para atrás el presupuesto, algo que, en fin, pues ya me dirán, a ver, un funcionario diciendo “sí, sí, aprobado, pero me lo cambias de arriba abajo”… En fin, no sé. Estamos hablando, efectivamente, de un Ayuntamiento al que le dicen desde Madrid que no está cumpliendo con el plan de ajuste, algo que, lógicamente, se niega desde la Corporación local, que está dispuesta a pelear por sacar adelante este presupuesto pero que, a las primeras de cambio, ha vuelto a sacar a relucir que no está dispuesto a hacer un ERE —otro, otra vez—, un tema cansino por recurrente (dejémoslo ahí) lo de presionar al personal.
Este es el gobierno municipal que hasta septiembre del año pasado abogaba "oficialmente" por la reincorporación de cerca de cien de los afectados del anterior ERE, el del PP, fiasco que le costó la definitiva pérdida de confianza de sus semi socios (en mayor medida la de Ganemos Jerez) y asunto que, como se ha mantenido desde estas líneas varias veces, ya me dirán cómo se iba a hacer, cómo se lo iban a explicar a los tutores de Hacienda que le piden ahora este nuevo tijeretazo.
En lo que sí tiene razón, sin duda, el gobierno municipal es en que el anterior ERE, mal hecho —no lo dice este cronista, lo han dicho los jueces sentencia tras sentencia— además de injusto, le está costando, le ha costado, un pico al Ayuntamiento, con la nueva ronda de las indemnizaciones que se han fijado.
Lo cierto es que todo este asunto, más el tema de las plusvalías —que a ver cómo acaba… vale, ya: mal— hace que la situación económica del Ayuntamiento no levante cabeza y que al final la ciudadanía contemple cómo Jerez se queda atrás respecto a ciudades de similares características (que eso sí, llevan una vida más sencilla, no tienen circuitos y cosas así, claro) sin que nadie sea ni capaz, ni capaz de echar una mano (por lo menos en Hacienda podían haber dejado un ejercicio de margen a ver qué tal iba la gestión de Jerez, la verdad, se ve que están en otra cosa). La alcaldesa, Mamen Sánchez, quiere ir a Madrid a hacer política, aunque sea política de “uñas y dientes”. Parece buena idea, pero lo mismo va tarde…
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