El plan del presidente de la Diputación de Sevilla para unificar en una gran empresa pública de la provincia de Sevilla va cogiendo forma. Con el 'nubarrón' de la sequía y la existencia de varias empresas 'cuasicomarcales' en el mapa sevillano, el socialista Javier Fernández de los Ríos presentó una propuesta este martes que iría en la línea de su plan inicial, marcado por potenciar su 'Gran Sevilla'.
La situación es la siguiente. El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, del PP, es quien ejerce el poder en Emasesa, la empresa que surte también a localidades como Dos Hermanas, Alcalá de Guadaira o la propia localidad de la que es alcalde el presidente de Diputación, La Rinconada.
La propuesta de Sanz pasa por encarecer ya un 30% el recibo del agua. Detrás, no solo la sequía, sino, lo que es peor, sus consecuencias. El recibo se encarece porque será necesario contar con recursos en el futuro para optimizar el servicio.
Y ante una sequía, acabará habiendo cortes de agua o reducciones del consumo que se transformarán, en mayor o menor medida, en una menor recaudación. Si se tiene en cuenta que hace 10 años que no se toca el precio del agua, la decisión, aunque pueda afectar donde más duele a los sevillanos, parece imparable y lógica.
Otra cosa es el cómo. Los ayuntamientos socialistas están proponiendo a Sanz que se negocie una subida poco a poco, que vaya incrementándose con el tiempo, y en esa línea se ha manifestado este miércoles Fernández. Málaga ha aumentado el recibo un 40%, y serán más las localidades y empresas públicas que encarezcan la factura.
Con esa propuesta detrás, parece aún más razonable que la provincia comience a funcionar bajo una sola empresa pública. Y el PSOE, mayoritario en los ayuntamientos sevillanos, pero sin la capital, clave en el agua, está dispuesto a tender la mano al PP.
En concreto, en el futuro se hablará de diferentes modalidades. Habría incluso voces que reconocerían al alcalde de Sevilla, ahora del PP, mantener la presidencia de esa empresa pública, por una vicepresidencia para la propia Diputación.
Para llegar a ese punto, habrá que convencer a una mayoría aplastante de ayuntamientos de todos los colores. Pero se siguen dando pasos. Desde Aljarafesa y el Consorcio del Huesna ya han declarado mostrarse favorables a una modalidad de empresa pública provincial, recoge Europa Press.
Mientras, hay 24 municipios que se surten de aguas subterráneas. En esos municipios, los problemas de la falta de lluvias incrementan la problemática. Más allá de eso, parte de la provincia ha normalizado que, llegados ciertos momentos del verano, o el agua sale turbia, o con menor presión, o directamente desaconsejan las autoridades su consumo.
Estas problemáticas históricas contarían, a futuro, con una posible empresa de mayor envergadura con mayor capacidad para responder a cualquier demanda, de forma más rápida y eficiente.
La sequía, caballo de batalla a menudo entre Junta y oposición, puede ser en Sevilla, contrariamente, punto de encuentro entre los ayuntamientos y los grandes partidos. Toca ver si la idea de Javier Fernández toma forma.
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