El regalo de Pablo Iglesias al Rey Felipe VI esta semana –Juego de Tronos en DVD- no me deja muy claro que pretendía el líder de Podemos. Aparte de autoproclamarse ‘khalesio’ del Poniente europeo, supongo que pretendería comparar al monarca con Joffrey –aviso que van spoilers-, quien fue envenenado merced a una conspiración para acabar con su tiranía.
Faltan muchos protagonistas, como el decapitado Joaquín Stark del Valle o el desterrado al Muro Jon Casal Nieve, y todos estos nombramientos serían discutibles, pero lo único claro es que la lucha por el Trono de Hierro va a ser encarnizada. Carlos Piedras daba como favorita, aunque perdiendo mayoría absoluta, a la ‘khalesia’ Pelayo. ¿Sufrirá una imputación por el caso Gürtel y el astuto y taimado Tyrion Saldaña le arrebatará el trono? ¿Qué ocurrirá con los profetas de una nueva religión laica, adoradores de la Señora de la Luz, que vienen de más allá del Mar Angosto repitiendo como un mantra que “la casta es oscura y alberga horrores”? ¿Quién se sentará en el Trono de Hierro y a qué precio? La respuesta a esta suerte de Juego de Tronos local vendrá el 24-M. O después.