Existe una directiva europea y un anteproyecto de Ley de Consumo Sostenible para poner barreras a la obsolescencia programada. No es posible seguir en una espiral de compra, brevedad en el uso, tirar porque la reparación no se contempla y vuelta a la funcionalidad a través de nueva adquisición. El agotamiento de los recursos naturales nos va a condicionar nuestro mañana.
En el marco del hogar, está muy implantada las tiendas de los "veinte duros" o del euro como suministro de artículos casi de usar y tirar, pues ante la reducción de metros cuadrados habitables, no hay lugar para el almacenamiento ni educación ni conciencia de reparación o reuso.
Construir adecuadamente y conservar, frente a destruir y abandonar. Acerado peatonal perfectamente ejecutado no puede soportar cargas de camiones de más de 12 toneladas, si no queremos ver baldosas rotas, desniveladas, charcos con lluvia y en grave riesgo nuestra propia integridad. Por cierto, las cisternas para el ocasional baldeo y vehículos de limpieza mecánica también afectan.
La Ordenación del Territorio ha de planificarse a toda una vida, para no lamentar precisamente su defunción. En el imperio romano y Al Andalus las infraestructuras se hacían para la eternidad, prueba de ello las admiramos y seguimos usando hoy en día, como puentes y calzadas.
Toda perdurable inversión conlleva un adecuado mantenimiento, por pequeño que sea, siendo precisamente el conocimiento científico y ancestral, la base de todo. Necesitamos una ingeniería con soluciones basadas en las leyes de la naturaleza, esas que nos condicionan nuestras vidas, ahora y siempre. Mis mejores deseos para hoy y a partir de mañana.
