Paco, las cotorras no quieren la paz

Ingeniero de Montes.

Cotorras de Kramer comiendose aceitunas gordales de olivo en HU Virgen del Rocio Sevilla.

Una paloma volando con una rama de olivo es el símbolo de la Paz. Desde pequeños nos enseñan a dibujarla y a sentir lo que significa, "vivir en paz, vaya usted en paz".

Un olivo gordal sevillano nos ofrece una aceituna grandiosa, pura delicia y como manjar que es, delicada en su cultivo, requerimientos climáticos delicados, recolección mediante el verdeo, ordeño a mano para evitar dañarla, todo para deleite de los más exigentes paladares.

Hay un olivo de esta variedad en la entrada lateral de Hospital Universitario Virgen del Rocío, presidiendo una rotonda elevada, muy bello y de grandiosas aceitunas. Ya huele a aceite, pues nadie las coge, y sabemos que a mayor tiempo la aceituna en el árbol, mayor rendimiento de aceite y menor calidad del mismo, hasta su caída. Mi sorpresa mayúscula ha sido ver hoy martes 8 de diciembre de 2020, un bando de cotorras de Kramer dándose un verdadero festín, con parsimonia y deleite, sin enemigos naturales, aceituna por aceituna, picotazo a picotazo, de esos verdaderos frutos del árbol de la paz. ¿Qué pasará cuando se trasladen al campo?.

La caída poblacional de murciélagos, principal consumidor de mosquitos tigre, propagador de la fiebre del Nilo, y polillas, de mirlos, gorriones y de palomas sevillanas en la ciudad, se debe en gran medida a la ocupación de nidos naturales por las cotorras de Kramer. Son longevas, muy fuertes y desplazan incluso a cernícalos primillas y vulgares, y a la mayor colonia mundial del nóctulo gigante del parque de María Luisa. Tenemos un problema en las ciudades y pueblos grandes.

Es una especie invasora y exótica, no nos viene bien ante el Cambio Climático. Pongamos remedio, lucha biológica, pues aquí no tiene enemigos naturales, u otros medios de control, es necesario implementar, y depende de nosotros mismos, que nos deje en paz.

Hoy se nos ha ido un amigo que supo llevar el AOVE ecológico a las más altas cotas del mercado, con grandes reconocimientos internacionales. Ahora echaremos en falta su presencia en los inolvidables últimos domingos del mes de noviembre, en su histórica almazara de Baena, para la entrega de los Premios Internacionales en Investigación y Defensa de la Producción Ecológica en honor a su hermano Andrés. Descansen en Paz, Paco Núñez de Prado.

Iván Casero

Ingeniero de Montes