Compensación de agua

"¿Y si compensáramos el agua utilizada, devolviéndola al medio ambiente? Cada metro cuadrado de caña consume 20 litros de agua al día, frente a la cuarta parte del bosque de ribera autóctono"

Ingeniero de Montes.

Cañas en el rio Adra de Almería

Toda actividad económica tiene un componente básico en el agua, incluso las tecnológicas, para dar de beber y aseo a sus trabajadores.

El rédito social, medioambiental y económico de dicho uso del agua ha de evaluarse para conciliarlos, intentando evitar el uso de la prevalencia ante la falta de comunicación, conocimiento o plazos de tiempo.

¿Y si compensáramos el agua utilizada, devolviéndola al medio ambiente? Restauración de humedales naturales —vuelta a ver lámina de agua en lagunas litorales y de interior temporales—, de ríos, arroyos y bosques de ribera autóctonos —cada metro cuadrado de caña común consume una media de 20 litros de agua al día, frente a la cuarta parte del bosque de ribera autóctono—, naturalización de cauces de ríos y arroyos en tramos urbanos frente a la dureza e impermeabilización del hormigón masiva mente utilizado que minimiza la recarga del subálveo que nutre los pozos colindantes —esenciales hasta en sequía—, son ejemplos sostenibles y necesarios frente al Cambio Climático replicables por empresas responsables del siglo XXI.

Las huellas —de carbono, agua, temperatura— de nuestras acciones han de tener sus correspondientes compensaciones. Compensación de agua de nuestros productos respecto a su huella de agua, es el siguiente paso evolutivo en pro de una sociedad mejor. La lucha frente el cambio climático exige medidas compensatorias.

Garantía de disponibilidad, de presente y futuro, de agua es esencial en la política estratégica de empresas radicadas en nuestro territorio, de nuestra sociedad para que hijos y nietos puedan seguir viviendo aquí, y del medio ambiente para que lo haga posible. Con esta responsabilidad asumida por todos, tenemos futuro asegurado, empezando desde nuestro presente.

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