Prejuicios e ignorancia contra el acento andaluz

El caso del profesor de La Línea al que le reprobaron "su dialecto" en una academia educativa de Madrid no es un hecho aislado, es una situación mucho más habitual de lo que cabe pensar y a la que se debe poner fin

El profesor de La Línea al que le han pedido que elimine su acento para trabajar en una academia madrileña.
El profesor de La Línea al que le han pedido que elimine su acento para trabajar en una academia madrileña.

Hace unos días un joven profesor, natural de La Línea, mostraba su decepción –y cierto disgusto– por el hecho de que una academia educativa de Madrid le solicitaba que, para contratarlo, eliminara su acento andaluz.

Se trata de un tema que, lejos de ser un caso aislado, sigue siendo recurrente, ya que el acento andaluz –o dialecto o variedad lingüística, que cada uno elija... no es el tema– sigue siendo una especie de estigma para determinadas personas de otras comunidades autónomas, que de alguna manera, lo asimilan con un sustrato cultural inferior, bien por desconocimiento o por extraños prejuicios que, sin duda, perviven en parte de la sociedad.

Es cierto que extremeños, canarios, murcianos, ceutíes, melillenses e incluso parte de los castellano-manchegos podrían pronunciarse en términos similares, pero al final, siempre es el andaluz ­–tal vez por población, por extensión de la propia comunidad, por emigración ‘forzosa’ a los grandes núcleos económicos del país o, tal vez, por su impronta en el acervo común­– el que se lleva el titular cuando ocurre un tema similar… y eso sin contar con que el joven profesor que lleva a cabo la denuncia pública es de La Línea, lo que le coloca directamente al borde de lo que se podría definir como ‘doble estigma’.

El próximo miércoles es el Día de Andalucía. Hay que decir que está muy bien todo lo relacionado con las celebraciones, los premios, etc, pero tal vez no estaría de más que se trabajara también para poner fin a todos los tópicos y prejuicios que, de alguna manera y aunque parezca mentira, siguen acompañando a las hablas andaluzas (que esa es la primera, si como se habla en Cádiz y Jerez, por ejemplo, ya no es lo mismo, qué decir de las diferencias de estas ciudades gaditanas con respecto a Granada o Almería, por ejemplo… es decir, ¿cuál es el acento andaluz?) en otras comunidades del Estado, aunque, en realidad, sería más preciso hablar solo de personas.

Desde este espacio, lavozdelsur.es le dice a este joven profesor linense una sola cosa: no hay nada que andar eliminando porque no hay absolutamente nada que eliminar. 

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios

No hay comentarios ¿Te animas?

Lo más leído