-Hola, querría hablar con Inés Arrimadas…
-Sí, soy yo…
-Hola, soy tu alcaldesa…
-¿Colau? Hummm…
-No, no, Mamen, Mamen Sánchez.
-Ah, la alcaldesa de Jerez, claro, sí. ¿Qué tal Mamen?
-Bien, bien, Inés, todo va bien…
-Pues tú dirás…
-Mira, Inés, que me preguntaba si tú no necesitarías que yo te echara una mano en esto del ‘procès’ o ‘el desafío soberanista’ o como quiera que lo llaméis en Ciudadanos. Mira, yo estoy aquí en Jerez relativamente con poco que hacer y me he dicho “pues Mamen, podías echar una mano a la jerezana del momento”… Te recuerdo que he sido diputada en Madrid durante unas cuantas legislaturas y, además, en las últimas semanas he hecho amistad con Artur Mas y Miquel Iceta… total, que estoy muy familiarizada con la actualidad catalana…
-Me parece muy bien, Mamen, podemos verlo, pero no sé de dónde sacas tiempo. Hace ya bastante que me fui, pero hasta donde yo sé y me cuentan los amigos, Jerez tiene un montón de problemas…
-Bueno, sí, siempre hay problemas que resolver. Por ejemplo, esta semana acabo de tomar una decisión muy complicada sobre el período de zambombas… Al principio, los socialistas queríamos ampliarlo hasta Reyes o Nochevieja al menos, sabes, pero al final, tras sopesar pros y contras, lo he dejado igual, una decisión muy difícil de tomar, Inés, ya digo, pero por lo demás…
-¿Y la cuestión económica, Mamen?
-Bueno, la cuestión económica del Ayuntamiento ha dejado de ser un problema.
-¿Has encontrado financiación?
-No, no, no hay novedad. Lo que pasa es que he estado hablando con un amiguete que estudió Filosofía y me ha dicho que cuando un problema no tiene solución, como por ejemplo pasa con las cuentas del Ayuntamiento de Jerez, técnicamente deja de ser un problema y se convierte en una aporía.
-Ah, una aporía, qué culta, Mamen. Bueno, y entonces… ¿entonces qué ocurre?
-Bueno, Inés… pues ya está. Problema que no tiene solución: aporía. ¿Las cuentas del Ayuntamiento son un problema? No. Ya no. ¿Hay algo que yo pueda hacer, solucionar? No. Pues hay que ser prácticos, a otra cosa…
-Pues gracias, Mamen, si se me ocurre alguna gestión que me puedas realizar con Mas o con Iceta o cualquier cosa que se pueda presentar más adelante, pues ya te llamo, porque entiendo que tú no me habrás llamado en realidad para entrar en Ciudadanos y estás dando vueltas a ver cómo me lo planteas, ¿no?
-No, no, Inés, yo soy socialista de toda la vida. No, no… te lo agradezco, pero no…
-Ya, ya, por eso… Oye, por cierto, ¿qué tal los concejales de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Jerez?
-Bien, bien, por aquí andan… son muy majetes, oye, no dan ninguna guerra, muy limpitos, unos chicos estupendos, ya digo.
-Vale, pues me alegro. Mamen, pues ya te llamo, que no quiero insistir, pero estoy aquí en Barcelona muy liada…
-Bueno, Inés, aunque me he quitado el problema de las cuentas municipales, liada, lo que se dice liada, liada yo, que al fin y al cabo tú estás en la oposición, que yo estoy aquí gobernando con seis concejales, que sacamos siete pero una concejala se me fue a Diputación…
-Lo sé, lo sé… Mira, cuando gobierne Ciudadanos eso no pasará…
-¿El qué?
-Que se te vaya alguien a Diputación. Vamos a suprimir las diputaciones…
-Bueno, bueno, ya se nos ocurrirá algo nuevo entre todos…
-¿Eh?
-Nada hombre, nada, tranquila, eres muy joven, ya entenderás…
-Bueno, Mamen…
-Ah, otra cosa, Inés.
-Dime, Mamen…
-¿Tú tienes pensado dedicarte en el futuro a la política en Jerez? Lo digo porque fíjate en lo que ha pasado con María José García-Pelayo, vulgo, la Pelayo, y conmigo. Vidas cruzadas: yo era diputada en Madrid y ahora soy alcaldesa de Jerez, y ella era alcaldesa de Jerez y ahora va a ser diputada en Madrid… ¿Qué cosas, eh, Inés? La vía de ida y vuelta que hay entre Jerez y Madrid está consolidada y ahora parece que tú estás abriendo una nueva vía con Barcelona, por el momento de ida y como sin duda eres la jerezana del momento…
-Pues en principio, no, Mamen, no he pensado en volver a Jerez. Yo estoy aquí muy contenta, pero, claro, en política…
-Claro, Inés, en política nunca se sabe… Venga, da recuerdos. Me tienes informada de lo que hagas, por favor…
-Vale, Mamen, descuida. Nos sé si te refieres exactamente a esto, pero si voy por Jerez a una zambomba ya te lo comento…
Comentarios