Después de la pandemia, todo parece lo mismo, pero nada es igual. Aparte de que el personal quiere estar en todas partes a la vez y, por supuesto, contarlo en redes sociales –entiendo que Mario Cabré saliera a contar a voz en grito por las calles (red social arcaica) lo suyo con Ava Gardner… no entiendo en absoluto qué aporta ‘subir’ que te estás comiendo un ajo con los colegas– ha habido otros cambios en la sociedad, digamos, más sutiles.
Por ejemplo, una vez pasada la pandemia, está comprobado que todo el mundo sabe de Medicina. Mejor dicho: todo el mundo sabe Medicina, sin la ‘de’. Jerez de la Fra, España, el planeta, se ha llenado de doctores. ¿Pero cómo puede decir el SAS que no encuentra médicos en Andalucía si ahora todos llevamos uno dentro? En las redes sociales, en las barras de los bares… estamos en un mundo lleno de médicos. Un mundo medicalizado.
Eso sí, son médicos que podrían definirse como esotérico-epidemiólogos. Especialidad: Epidemiología Esotérica. En realidad, ustedes llevan ya varios meses escuchándolo (o ‘propagándolo'... a saber), casos del tipo: X tuvo un ictus, fue por las vacunas; Y tiene un cáncer, ha sido por las vacunas; Z tuvo un problema cardiaco, pues por supuesto que ha sido por las vacunas. A, B, C, D y E tienen gripe ya en octubre… pues son las vacunas, de qué va a ser. Hablamos de las de la covid, claro, que a saber qué nos han metido de matute.
Ni idea de lo que está corriendo por las redes sociales, que lógicamente son las que ‘inoculan’ todos estos saberes ocultos en la gente. No tengo tiempo. Ahora bien, está claro que la labor de quién sea está siendo todo un éxito. Y ya cuando escuchas lo de “que me lo ha dicho fulanita, mi prima la médica”, o “menganito, mi yerno enfermero”, sabes que el éxito está ahí, la audiencia, asegurada.
Vaya matraca que llevamos con este asunto, sobre todo después del verano. En realidad, este cronista está de acuerdo: además de meternos dentro de la vacuna del covid estudios de Medicina (así, si fuera la película Matrix) está claro que han aprovechado para meternos un poco más de idiocia, algo para lo que ya saben ustedes que ni hay ni habrá vacuna…
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