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Estaba claro hace meses que la alcaldesa estaba dispuesta a dar el paso pero quería esperar a ver qué pasa.

Se avecina un mes de noviembre muy interesante en el PSOE de Jerez. En la calle Sevilla no son de aburrirse. La alcaldesa, Mamen Sánchez, ha anunciado que se presenta para ser secretaria de la agrupación local, por lo que le va a disputar este puesto a Isabel Armario, la concejala "mujer de partido" que ya ha dicho que se va a presentar.

Estaba claro hace meses que la alcaldesa estaba dispuesta a dar el paso pero quería esperar a ver qué pasa. "A ver qué pasa" se puede resumir en tres factores: el primero y el segundo van íntimamente ligados, evaluar los movimientos del partido para ver si muñía una (otra) lista y esperar a ver si el congreso provincial tenía algún "detalle" con ella, al fin y al cabo es la alcaldesa del mayor ayuntamiento de Cádiz. En el citado congreso Sánchez no obtuvo nada de la nueva ejecutiva (ni para ella ni para nadie de su confianza) e inmediatamente después se encontró con la lista de la concejala Isabel Armario y su "invitación" a sumarse, que no deja de tener un puntito humillante, por muchas tragaderas que haya que tener en política. Sánchez podía haber evitado este envite pero —y aquí llega el tercer factor— hacía tiempo que tenía gente de su confianza sondeando a la militancia para ver qué posibilidades tendría una candidatura encabezada por ella. La respuesta está clara: siguiendo con el símil que se está utilizando, a la alcaldesa le han dicho que la "piscina tiene agua", vamos, que se "tire", que tiene muchas posibilidades de ganar (le han dicho a ella; al cronista también le han comentado desde la candidatura de Armario que ganará la concejala). Y allá que se ha tirado Sánchez. Veremos… 

A Mamen Sánchez le va mucho en este empeño, ya que una derrota comprometería sobremanera su candidatura a la alcaldía de Jerez cuando llegue el momento. En el mejor de los casos, con viento a favor, podría volver a ser candidata en 2019 con una lista prácticamente impuesta, como le ocurrió en 2015, algo que precisamente quiere evitar (en la medida de lo razonablemente posible) echando este pulso al partido. En este tema no hay que pasar por algo que, quitando los dos años largos que lleva al frente de la alcaldía de Jerez, Sánchez ha desempeñado su carrera política prácticamente fuera de Jerez, ya que fue ni más ni menos 15 años diputada en Madrid. Eso y no tener cargos internos en el partido, hacen que siempre se la haya contemplado con un punto "paraca" que ahora, asentada en su ciudad, quiere enterrar de forma definitiva…

Bien, las espadas están en todo lo alto. Un mal paso puede ser muy grave para el futuro, más para Mamen Sánchez que para Armario, muy arropada por el aparato del partido. La alcaldesa quiere poner fin a la tradicional bicefalia del PSOE local, solo rota durante unos breves años por Pilar Sánchez. Como se decía antiguamente en política: “Al suelo, que vienen los míos”…

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