Las nuevas tecnologías han reinventado diversos aspectos de la vida de las personas, como su forma de comprar o de ver la televisión. Pues bien, cabía esperar que la educación no fuera una excepción a esta norma. Ahora que la vuelta al cole está a punto de llegar, es el mejor momento para hacer un repaso a este tema.
Según el Ministerio de Educación Cultura y Deporte, en España existe un PC por cada 3 alumnos. El 90% de ellos tiene Internet de alta velocidad, si bien existen importantes brechas geográficas entre los centros púbicos y los privados.
Diferencias considerables en la digitalización de centros públicos y privados
La digitalización de la educación es un punto clave en la Agenda Digital en España. Por ello se ha propiciado el acceso a Internet en centros educativos, la dotación de ordenadores y otros equipos informáticos para alumnos y profesores, así como la introducción de plataformas y servicios online que complementarían la enseñanza tradicional.
Pero tal como se indicó antes, la dotación tecnológica es mucho mayor en centros públicos que privados. Mientras que en estos últimos existe una tasa media de 3,9 alumnos por ordenador, en los primeros el dato se sitúa en 2,6 alumnos por equipo.
¿Cómo afrontar la vuelta al cole? Sin duda, con mucha tecnología
La vuelta al cole 2018 está ya aquí prácticamente y toca hacerle frente. A lo largo de los últimos años han sido muchas las iniciativas que han surgido en la búsqueda de la digitalización de la educación española. Los presupuestos para ello se han materializado a través de las distintas administraciones nacionales y autonómicas y con la ayuda de fondos comunitarios de la Unión Europea.
Probablemente la iniciativa más importante haya sido el Programa Escuela 2.0, cuyo objetivo es integrar las TIC en las aulas incorporando infraestructuras y conectividad de última generación. Pero desde el año 2012 no ha surgido ningún proyecto de tal magnitud, no obstante, sí se han ido creando iniciativas pequeñas según las necesidades inmediatas que presentara cada momento.
De cualquier modo queda más que patente el potencial y las ventajas que suponen las TIC para este sector. Dispositivos como un ordenador de sobremesa, un portátil o una tablet permiten a los alumnos trabajar con aplicaciones, buscar a través de Internet o interactuar con sus compañeros. Estos equipos promueven un aprendizaje colectivo y respetan los ritmos que necesitan los alumnos, especialmente aquellos que tienen necesidades especiales.
Según una encuesta, el 83% de los profesores afirma que los alumnos se muestran más interesados y están más motivados si utilizan las TIC en clase. Una opinión que comparte también un 93% de los alumnos. Por otro lado, el 72% de estos últimos señala que les resulta más fácil adquirir conocimientos con estas nuevas tecnologías.
¿Móvil sí o móvil no en clase? He ahí el quid de la cuestión
Ahora que los dispositivos electrónicos son más asequibles y tienen todas las prestaciones para facilitar el día a día de las personas es difícil encontrar a alguien que no tenga alguno. Y entre los más pequeños pasa lo mismo. Pero mientras que queda clara la importancia de las TIC en la educación, el debate se centra en el uso de los teléfonos móviles en el colegio.
Ni siquiera se lo han pensado mucho en Francia donde se ha tomado la decisión de que los menores de 15 años no puedan utilizar los móviles en el colegio, ni siquiera en tiempo de recreo. Y si bien en España no hay una prohibición legislativa al respecto, se aplica prácticamente la misma medida en los centros, ya que así lo deciden los directores de los mismos.
Sin embargo, desde el sector educativo se pone en duda la efectividad de prohibir el uso del teléfono móvil dada la incongruencia de que estos dispositivos son parte fundamental del día a día y por otro se les prohíba su utilización durante las horas lectivas.
La realidad es que los niños tienen teléfonos móviles. El Instituto Nacional de Estadística (INE) señala que uno de cada cuatro menores de diez años tiene uno, mientras que a los once años son casi uno de cada dos; a los doce, tres de cada cuatro y a los catorce, el 90% de ellos. Es por ello que desde el ámbito educativo no ven claro prohibir los móviles y sí se muestran más partidarios de ofrecer pautas y normas para un buen uso del mismo.
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