Sonia Martínez abre en la calle Corredera Frida La Vida, una tienda de ropa inspirada en la pintora mexicana, que coincide con el 110 aniversario del nacimiento de la artista.

"Yo que me enamoré de tus alas, jamás te las cortaré", es lo que se repetía una y otra vez la artista mexicana Frida Kahlo cuando su gran amor, el pintor Diego Rivera, le era infiel. El concepto de amor libre de Frida, mezclado con la lucha incansable de sus ideas y de los derechos de la mujer, enamoró a Sonia Martínez, una jerezana de 38 años que el pasado 5 de mayo abrió su tienda de moda Frida La Vida, ubicada en la calle Corredera. "Me gusta mucho su filosofía", incide Sonia mientras se toquetea sus largos pendientes de calaveras negras con rosas púrpuras. Su pasión por la pintora coyoacanense hizo que, de manera inconsciente, honrara su arte y su memoria en el 110 aniversario del nacimiento de Kahlo. "La descubrí a través de una amiga y la verdad es que me gustaría sentirme identificada con ella", expresa. 

Si bien Sonia afirma no tener buena mano para dibujar y solo ha trabajado como auxiliar administrativa en un taller de su provincia, nada la frenó para embarcarse en el duro viaje del autónomo cuando vio que no encontraba una oportunidad laboral en cuatro años. "Siempre me han gustado la ropa, la moda, y abrí esto porque algo tengo que hacer con la edad que tengo. Tenía que buscarme un futuro". Y fue a principios de año cuando decidió aventurarse a inaugurar una tienda de ropa que conjuga la moda retro, flamenca y moderna con marcas 100% nacionales, en el centro de Jerez. "La gente que viene se marcha muy contenta y me dice que qué alegría, que me vaya todo muy bien y que esto dure porque es algo diferente". Algo diferente, así fue como se construyó el icono que hoy florece con fuerza en este pequeño local de la ciudad. Los símbolos que decoran el establecimiento de Frida La Vida transmiten esa felicidad que Frida inspira, una mujer que ni las 32 operaciones quirúrgijas que tuvo consiguieron espantarle la sonrisa. Yedra que brota de la pared, flamencos en las cortinas, maniquíes con cabeza de unicornio, piñas doradas, un cactus de peluche... Y es que Sonia busca diferenciarse de las demás tiendas de moda con su estilo y gracias a un puñado de marcas españolas que oferta en su comercio. Gafas fabricadas en Tarifa; camisetas de la firma cordobesa Etnia-Y que mezcla rostros de leyendas vivas o muertas, como es el caso de una ilustración original que es mitad Camarón de la Isla, mitad Michael Jackson; Be-happiness, una marca orense de camisetas con dibujos de figuras internacionales como Amy Winehouse, Paul Newman o la propia Frida; Poloq, una firma madrileña de polos de hombre; Príncipe Flamenco, una marca original de La Línea; la famosa empresa cántabra Aire-Retro y Noc Atelier, una firma especializada en diseñar y customizar complementos 100% a mano, son algunas de los productos que Sonia alberga en su coqueta tienda. 

"Quería traer algo distinto y que la gente viniera aquí a buscar lo que no hubiera en otras tiendas"

"Quería traer algo distinto y que la gente viniera aquí a buscar lo que no hubiera en otras tiendas", explica esta jerezana sobre su selección de marcas originales. "Y fomentar así las firmas españolas", agrega. Aunque ella veía "difícil e imposible" iniciar un negocio de este calado, confiesa que las redes sociales se lo solucionaron todo. Después de contactar con las marcas al inicio del 2017, su familia y amistades fueron los que ayudaron en la parte más forzosa: el decorado y la inauguración de la tienda. "Aquí hemos estado todo el mundo", señala Ángeles, la madre de Sonia, que descansa en un taburete junto a la mesa de su hija. "Yo también he ayudado", murmura Martín, el pequeño de tres años de Sonia, mientras esconde la cabeza detrás de su mochila de Spiderman. En estos tres meses que lleva detrás del mostrador, Sonia dice que no le va mal y que espera que todo fluya mejor cuando empiece octubre. "Me he marcado un plazo y si veo que después de Navidades esto no va, no me lo pienso", admite. En su negocio Sonia apuesta por un buen producto, de alta calidad y exclusivo. "La gente viene buscando marcas como Aire-Retro", apunta al tiempo en que coloca las pocas perchas que le quedan después de haber colgado el cartel de las rebajas. Comparte que a su tienda entran personas de todas las edades, pero sobre todo, mujeres. "Tengo mucho género de chico y desde aquí les animo a que entren", anuncia. Y es que vestir con la cara de las leyendas del cine, la pintura y la música se ha convertido en una seña de identidad personal. De ahí que Sonia desee que otros conozcan la historia de superación y lucha de Kahlo y quieran llevar con orgullo todo lo que ella significa. "¡Viva la vida!", aparece escrito en varios cuadros y letreros que están colgados por toda la tienda, otra de las frases que Frida repitió hasta el último suspiro. Por ello, ¡Frida la vida!

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Claudia González Romero

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