Tocar la guitarra, componer y tener muchas ganas de compartir música no bastan para vivir de la música. Formar una banda es una apuesta valiente que en muchas ocasiones acarrea más quebraderos de cabeza que remuneración. Son muchas las dificultades a las que se enfrentan esos grupos emergentes que no tienen cabida en el circuito comercial a la hora de dar a conocer su trabajo. Financiación, alquiler de salas, un hueco en el cartel de un festival…
Las bandas se sienten ignoradas a la hora de acceder a agencias y festivales. El jerezano Jorge Curtido Sánchez, con más de 10 años de experiencia en la productora 156Producciones, así lo ha percibido. Este amante de la cocina, divulgador de recetas a través de Házmelo casero y autor del primer libro de cocina para campamentos scouts, se sumerge en una nueva aventura laboral llamada Carretera y Manta Producciones.
“Quería dar el paso de independizarme”, comenta a lavozdelsur.es. Por ello, ha lanzado su propia agencia de management, booking y producción donde desarrolla toda la labor comercial, desde buscar conciertos para las bandas hasta una hacer una ronda de contactos con organismos públicos o promotoras para darles una oportunidad en eventos musicales.
“He vivido ciertas cosas en el mundillo que no me gustaban y que pienso que se pueden hacer de forma diferente”, explica. Así, incorpora una filosofía y un método de trabajo que considera “pioneros” y que pretende facilitar el camino para que todo vaya sobre ruedas y los grupos se sientan arropados (con una manta).
En la agencia, Jorge trabaja de la mano de Jara Martínez, promotora, mánager y fotógrafa extremeña con la que coincidió en un proyecto de management. “Ambos coincidimos en cómo queremos que sea una agencia”, dice.
Para él, los dos puntos fundamentales que caracterizan a Carretera y Manta son la accesibilidad económica y el trato ofrecido. Según explica, “hay muchísimas bandas emergentes muy buenas a las que se le pone una barrera económica, les piden una cantidad que la mayoría de ellas no pueden asumir al no tener presupuesto propio”.
Esta dinámica motivó al jerezano a que el servicio de booking fuera a cero euros. “Solo pedimos un compromiso de ambas partes para conseguir objetivos y beneficios mutuos”, añade. También cuida la cercanía con las bandas, esa atención que muchas veces no existe.
"Muchas veces no recibes respuestas"
“Pasa muchísimo. No recibes respuestas, ya sea de una productora, de un festival. Se mandan correos, se contacta a través de redes sociales, y ni siquiera reciben un no por respuesta. Lo he vivido en primera persona”, comparte Jorge. Por esta razón, en su agencia van a tener esa consideración con los músicos.
“Contestamos a absolutamente todas las propuestas, sea para un sí o para un no, es algo que se agradece”, comenta. Quiere ayudar, servir de apoyo y empujar a las que empiezan y a las que ya tienen una trayectoria y desean seguir avanzando. Es consciente de lo “difícil” que es despegar para un grupo recién nacido, sobre todo, porque “el mercado está muy saturado, hay mucha oferta a nivel nacional y todo depende del presupuesto”.
Sin embargo, en ese proceso, entra en juego su papel, para que los artistas giren y pasen más tiempo en carretera que en el sofá (con una manta). “Una banda con un presupuesto grande que vaya con una productora de renombre, va a tener una facilidad que no va a tener una emergente. El apoyo que se le de a la banda desde el principio va a hacer que ese proyecto llegue mas lejos”, sostiene.
Rock, metal, celtic punk, hardcore, rap metal. Además de por su metodología, esta agencia llama la atención por ayudar a dar visibilidad a grupos que disfrutan tocando géneros alternativos. Actualmente el roaster presenta 22 bandas de distintos rincones de España entre las que están Kardinal Punch y Ankalawela.
“Se pusieron en contacto más de cien bandas y nos siguen llegando propuestas a diario, ha sido una sorpresa”, cuenta Jorge que desde que dio a conocer el proyecto en noviembre del año pasado ha recibido “un aluvión de propuestas”. Tantas que ha tenido que trasladar a muchas de ellas que “de momento, no podemos abarcar más”.
Paimon (voz), Moshu (guitarra solista), Kaesai (guitarra rítmica), Ascedeus (bajo) y Veimir (batería) son apuntados por un foco de la sala La Guarida del Ángel. Son Kardinal Punch, banda jerezana de metal alternativo, metalcore, hardcore y death metal, que se puso en contacto con la agencia. Las rifs enérgicos y las voces melódicas dan vida a este grupo surgido en 2019 que proponen algo diferente y moderno. “Es muy novedosa, es la única que hay en Jerez de este tipo”, señala Jorge.
Al escenario de este mítico lugar de culto a la música en vivo también suben medio conjunto de Ankalawela. Este grupo de hip hop & rap, flamenco, electrónica, punk y reggae que cuenta con un amplio recorrido desde 2017, busca “transmitir ese sabor andaluz a toda la gente que nos escucha y, de esa forma, poder encontrar el punto medio entre la fiesta y la protesta”. Este año irán “bajo el abrazo de Carretera y Manta” con las pilas puestas para lanzar nuevos vídeos, fechas y disco. Talento jerezano que se suma al resto de las bandas de esta agencia.
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