“A ver cuándo inventan una plataforma que permita evaluar a los caseros antes de alquilar una casa”. Algo así leyó una noche Yeray Julián en redes sociales, y se le encendió la bombilla. Consultó con su abogada, tanteó un poco el terreno, y en poco tiempo puso a trabajar en ello a sus empleados, y así hicieron desde DevsDNA, una compañía especializada en el desarrollo de aplicaciones móviles nacida en 2014 en Sevilla, donde residía su presidente, natural de Canarias, por aquel entonces.
“Ese ADN andaluz lo tenemos”, dice Yeray Julián, fundador y CEO de Urugo, que es como se llama la app que puntúa a los propietarios de viviendas en alquiler, cuando atiende a lavozdelsur.es. “Una de las cosas que teníamos claras cuando creamos la empresa”, dice, “es que queríamos contribuir a la sociedad”. Por eso nace Urugo, una aplicación móvil que quiere “resolver la problemática que existe actualmente con la burbuja del alquiler en España”, ya que tiene presencia en todo el país.
De forma anónima, los usuarios pueden comentar aspectos relacionadas con el propietario de una vivienda que está en alquiler, desde los desperfectos que pueda tener la casa hasta el carácter del casero, ya que tiene una serie de etiquetas que permiten al usuario de la app conocer más detalles sobre su posible casero —arrendatario poco comunicativo, homofobia, xenofobia, racismo, vivienda sin mantenimiento, incumplimiento de cláusulas del contrato…—.
“Hablando con distinto tipo de gente, jóvenes, personas con raíces inmigrantes, madres solteras… nos dimos cuenta de que había perfiles que tenían muchos problemas para encontrar un alquiler”, relata Yeray Julián, CEO de Urugo. "Pensamos que estaría bien que, igual que miras en una web para saber cómo es el sitio donde vas a comer, hacer lo mismo pero a la hora de alquilar un piso. Lo hablé con el equipo, compramos los dominios y nos lanzamos en pocas semanas”, dice.
"No queremos que sea una app para criticar a los caseros", matiza el CEO de Urugo, "sino que sirva para que la gente encuentre alguien con quien coincida, para evitar problemas futuros por falta de entendimiento". "Queremos incluir en el juego a los propietarios", agrega Yeray Julián, a quién le gustaría que dueños de viviendas utilizaran la aplicación para marcar sus líneas rojas y encontrar a inquilinos compatibles. "La idea es centrarnos en la parte humana, que es lo que falla muchas veces", concluye.
Pero, ¿cómo controlar los posibles comentarios falsos? Julián responde: "Esta app es distinta a las que hay de hoteles o restaurantes, no creemos que exista tanta problemática, pero en ese caso nos planteamos pedir una foto del contrato para verificar que es cierto, para luego destrui el rdocumento inmediatamente", indica el CEO de una herramienta que, aunque de momento utilizan pocas personas, tiene un alto índice de comentarios positivos. "Es muy bonito, la gente voluntariamente esta hablando bien de su casero, y eso es lo que queremos", señala.
"Somos un servicio que nace con vocación de ayudar a propietarios e inquilinos a coexistir en paz, facilitando que quien busque una vivienda de alquiler pueda conocer con más detalle al casero con el que está negociando, evitando futuros problemas antes del temido compromiso de firmar un contrato", indican desde la propia app. "Esto permitirá tomar decisiones informadas, empoderarse con el conocimiento y decidir si un alquiler es beneficioso o no, ya no solo por el aspecto geográfico o económico, sino también por el aspecto emocional y humano", agregan.
Yeray Julián, junto a su equipo de DevsDNA, no pretende "vivir de Urugo", porque sabe que el proyecto no le reportará grandes beneficios, más bien al contrario, su idea pasa por "aportar a la sociedad". "Queremos escuchar a la gente, conseguir una app positiva". De momento tienen presencia en ciudades como Barcelona, Madrid, Sevilla, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria... "Dentro de un tiempo ojalá tengamos el número suficiente de usuarios como para elaborar un mapa gratuito en tiempo real del estado del alquiler en España, con las zonas más apreciadas, dónde hay caseros más amigables con el colectivo LGTBI, dónde las mujeres tienen menos problemas para alquilar...", enumera el CEO.
"Con la Nueva Ley de la Vivienda se está produciendo una brecha generacional entre propietarios e inquilinos, siendo éstos últimos la parte más débil debido a la gran demanda de alquiler que existe actualmente en el mercado inmobiliario", se lee en la descripción del proyecto, que busca que los usuarios "esquiven los malos momentos actuales a la hora de buscar un alquiler o simplemente detectando cuando su forma de vida o personalidad no encaja con la del propietario de una vivienda que están pensando en alquilar". ¿Y por qué se llama Urugo? "La explicación es un poco rocambolesca", dice Yeray Julián. "Urugo es un idioma que se habla en Ruanda, porque queríamos expresar que a veces parece que los caseros hablen un idioma y los inquilinos otro...". La idea es que eso, poco a poco, cambie.
Comentarios